Suchitoto, Gaceta noticias -El Slavador-

¿Tiempo de transitar de los abrazos y huacales hacia propuestas factibles de cumplir?

“En mi país, hablar de los problemas que adolecemos como sociedad se compara con pretender contarle las patas a 50,000 ciempiés” Melvin Rigoberto Santos Molina. Licenciado en Letras.

En Suchitoto, al hablar sobre temas vinculados al liderazgo, produce muchas valoraciones, sensaciones e ideas que, al menos para este servidor, le generan muchas dudas y escepticismo, dado que se han realizado ciertos esfuerzos por formar en temas de empoderamiento, pero no se pueden catalogar como canteras de las cuales se pulan los agentes de cambio para asumir el reto de responder a las ignoradas necesidades por tantos años de los suchitotenses de las zonas rurales y urbanas.

Como una aclaración ética e intelectual, nunca mi análisis está con dedicatorias especiales o alusivas a gobernantes anteriores o de la actualidad. Asumo que se posee un nivel de madurez política para ser capaces de escuchar una voz disidente que nunca buscará destruir o motivar al odio. Para eso, fácilmente se abre un perfil falso y se saca todos los jugos gástricos acumulados por el elocuente silencio y la inoperancia ante los problemas.

Ahora bien, el tema del perfil de una persona que aspire a liderar la gobernanza local debería ser considerado un tópico clave para la ciudadanía que depositará su confianza para la resolución de los múltiples problemas que afectan este municipio. En ese sentido, dicha empresa requiere tener unas características muy precisas que llevan una serie de principios que le proporcionen las credenciales para gobernar proactiva y receptivamente ante la polifonía de voces que reclaman proyectos.

Un perfil se puede definir en base a la formación académica, su reputación social y laboral, así como el equipo de trabajo que le acompañaría al ganador de esa elección. Daría muestras para observar y reflexionar sobre cuáles son las motivaciones que lo han impulsado a competir.

Se mencionarán un conjunto de características importantes que deben cumplir mínimamente un candidato a la comuna de Suchitoto:

  • Un ciudadano competente capaz de escuchar las voces más estridentes y variadas de los sectores del municipio que claman por un gobierno local al servicio de sus electores.
  • Un ciudadano con una reputación y calidad moral incuestionable.
  • Una plataforma de gobierno con planes y proyectos focalizados con estudios de factibilidad y aplicación que den garantías de su ejecución si resultase ganador del proceso electoral.
  • Un ciudadano cuyo espacio de movilización y presencia no se reduzca a su oficina o la asesoría que carece de un componente empírico de quienes sufren los problemas en carne propia.
  • Un gobernante desvinculado de intereses con sectores o presiones políticas para tomar las mejores decisiones en consonancia con lo que necesiten los habitantes en su barrio, cantón o caserío.
  • Desde el momento que sabe de su triunfo, comunicar a la población su estrategia de ejecución de sus proyectos.
  • Mecanismos de comunicación directa, así como la declaración periódica de las inversiones y el quehacer municipal y sus dependencias o unidades que la constituyen con montos y facturas.
  • Un área de atención y acceso de información para la ciudadanía o interesados en solicitar información de proyectos.
  • Al cabo de cumplimiento, dejar establecidas las bases legales y de trabajo para la continuidad de las iniciativas que requieren más de tres años.
  • Una logística de organización urbana y rural en asociaciones, ADESCOS y cooperativas para la realización de proyectos en conjunto con los liderazgos de cada barrio, cantón y caserío. Una municipalidad en estos tiempos no posee la capacidad para dar soluciones integrales a todos los sectores y expresiones sociales de un municipio con las características de Suchitoto.
  • Un gobernante en cuyo trabajo esté como prioridad empoderar a las organizaciones con diversas formaciones y capacitaciones que sus finalidades sean otorgar todas las herramientas necesarias para emprender negocios, agro – negocios y eco – negocios que les permitan sostener sus familias y activar la economía a nivel local.
  • Formación constante y continua en temas de género, sexualidad, inclusión y las artes en general para dar los espacios versátiles para que las personas independientemente su edad, posean formas de ocio saludables que ayuden a rescatar nuestra identidad social y cultural que se encuentra en gran decadencia por la transculturización que reproducen las grandes industrias comunicacionales en sus diversas manifestaciones.
  • Declaración pública de su patrimonio al entrar a su mandato y su salida para obtener un finiquito que lo absuelva o le aperture un proceso de investigación por presunto enriquecimiento ilícito por parte de las autoridades judiciales correspondientes.

Los candidatos que carezcan de estos elementos o carta de presentación, los suchitotenses no deberían ni siquiera valorar brindarle su apoyo, en tanto que sabe que sus intenciones no corresponden con sus intereses o problemas de su localidad. El electorado debe entender que los abrazos, huacales o canciones no le resolverán. Ni una gallina o cartón de huevos. Los ciudadanos deben exigir respeto a su inteligencia. Pedir debates entre candidatos para conocer sus visiones, la forma de enfrentar un compromiso tan grande como gobernar una alcaldía, y un espacio donde la persona de a pie pregunte o exprese su opinión acerca de los perfiles de los aspirantes y su oferta electoral.

Finalizo esta primera parte de este artículo de doble entrega, exhortando a la ciudadanía:

  1. Su forma de aproximarse a la oferta electoral sea a través del razonamiento y no las emociones porque tradicionalmente la manera de manipular a los electores es a través de consignas, clichés, huacales o discursos de odio, división o infamias.
  2. Exigir después del proceso electoral el cumplimiento de la oferta propuesta por el alcalde electo.
  3. Denunciar todo tipo de anomalías de las cuales haya fuertes indicios en la administración de los recursos municipales.
  4. Denunciar abusos de autoridad o atropellos que los empleados de cualquier unidad de la municipalidad realicen sobre la ciudadanía.

Por: Melvin Rigoberto Santos Molina

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Melvin Rigoberto Santos Molina. Licenciado en Letras, graduado de la Universidad de El Salvador. Actualmente docente de Lenguaje y Literatura. Cultivo el género poético y el ensayo.

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