La planificación y gestión del espacio turístico constituye un requerimiento esencial para el desarrollo de la actividad turística puesto que garantiza, por una parte, la correcta integración del turismo en la economía, sociedad, cultura y medio ambiente locales, y, por otra, la adecuada satisfacción de la demanda turística, elemento indispensable para la viabilidad económica de los proyectos turísticos en un mercado de competencia creciente.

La planificación y gestión de un área turística vela por un uso racional de los recursos naturales pero también, desde el punto de vista prepositivo, aporta las estrategias de actuación para poner en valor recursos turísticos de acuerdo con su potencialidad y establece las líneas maestras para la consecución de un desarrollo turístico sostenible.

¿Qué tipo de producto turístico se deberá ofertar en Suchitoto?

La comercialización del turismo se basa esencialmente en la segmentación, en un intento de encajar la oferta y la demanda en función de las características del mercado. El tipo de visitantes atraídos y los visitantes de ciertos segmentos pueden ser más aceptables que otros. En nuestro caso se han realizado intentos de desarrollar actividades artísticas y atraer a visitantes interesados en la oferta cultural.

Sin embargo, si bien esta era la oferta del sueño de Alejandro Cotto, se vuelve muy limitada, y la realidad nos muestra que hay otros Pueblos Vivos que han diversificado su oferta en vista de la demanda de los visitantes, lo cual plantea un reto, un desafío en identificar cual ha de ser el “producto” que sea suficientemente atractivo para atraer visitantes sostenidamente para mantener la planta turística y permitir su crecimiento, sin perder la esencia colonial que lo identifica en la plaza, preservando el patrimonio, sin permitir ningún tipo de desarrollo que lo altere. Este es un objetivo nacional, es decir, la conservación del patrimonio, y debe recibir una mayor prioridad que los beneficios económicos que pueden derivar del desarrollo.

¿Qué tipo de visitante se debe atraer?

El tipo de visitante a atraer vendrá determinado en parte por los propios recursos turísticos disponibles y las instalaciones de alojamiento, el transporte y los servicios. Se deben hacer estudios de mercado basados en un inventario de la oferta, es decir, lo que ofrece la ciudad y la micro-región, así́ como el estado de desarrollo en que se encuentran los recursos turísticos. La mayoría de los nuevos destinos o “rutas” cuentan con un conjunto de atractivos que pueden utilizarse en una estrategia de marketing. A veces, los atractivos son abundantes y se pone al alcance de los consumidores una serie de productos que a nadie en el destino se le ha ocurrido organizar y vender, como el concepto de “la Ruta de las Flores”, ¿Qué vende el nombre?, ¿Qué ofrece?. Se necesita integrar un concepto asociado a Suchitoto que “venda” la idea integrada de lo que ofrece.

¿Cuáles son los impactos probables ?

El desarrollo del turismo es un proceso a largo plazo que requiere una inversión sustancial y permanente en infraestructura e instalaciones. Por estos y otros motivos, la mayoría de los gobiernos locales se interesan en los beneficios económicos que genera el turismo. Sin embargo, el turismo también conlleva impactos de orden social, cultural y medioambiental, cambia la forma de vida de las personas, la transculturización tiene sus riesgos, el turismo arrastra también efectos indeseados. Aunque la experiencia nos permite discernir las consecuencias probables de fomentar un tipo de turismo en detrimento de otros, pueden surgir problemas inesperados en el futuro.

La Diferenciación

La apuesta de Suchitoto es hacia el tema Cultural, y siendo un producto que ya cuenta con un prestigio, es definitivamente esa es la ruta a seguir, como elemento diferenciador frente a su competencia, de los demás Pueblos Vivos.

Eso está bien, es más, muy bien; pero es importante no solo definir el producto, sino estudiar el Mercado y sus preferencias y/o necesidades. Nosotros NO tenemos un antecedente del aprecio por la cultura en general ó la nuestra en particular. La manera como lo entendemos, es a través de las manifestaciones culturales entendidas como las presentaciones artísticas, de teatro, conciertos de música de cámara, exposiciones pictóricas, recitales de poesía y otros similares, que se desarrollan generalmente por la tarde-noche, la pregunta es ¿Cuantos compradores hay para ese producto?, ¿Dónde están?, ¿los podemos incentivar a venir por esto?, ¿qué les vamos a ofrecer además del espectáculo cultural?, ¿Que facilidades tenemos para los visitantes?, ¿son los precios accesibles?, ¿Vale la pena el “viajecito” y el riesgo del viaje de regreso (por las noches)? , y la gente del pueblo ¿se identifica con esta oferta?, en mi experiencia, la gente del pueblo no identifica, como propio ese concepto o lo que significa.

El tema cultural es como el conocimiento del vino: la mayoría de los comensales lo toman, más realmente no diferenciarían uno de otro, no existe el habito ni la educación para su disfrute, de ahí́ que muchos de quienes lo toman no lo hacen por su gusto personal ó porque el vino sea uno de sus hábitos, sino más bien porque es importante como parte de los requisitos a llenar para lograr la aceptación y asegurar la pertenencia y reconocimiento de una subcultura en particular. El aprecio por la cultura es similar. Esto no lo hace muy potable como tema para vender el producto turístico de Suchitoto. Hay menos compradores de este “producto” (la cultura) que de otros. De ahí la importancia de socializar las manifestaciones culturales por un lado y por el otro, diversificar la oferta. Este comentario no es para dejar de lado el factor de diferenciación, sino más bien para estructurar alrededor del mismo otros elementos complementarios que contribuyan de manera efectiva al logro del objetivo: atraer más visitantes.

Escenarios

El escenario 1 supondría, luego de terminada la cuarentena domiciliar, volver a lo que podríamos llamar “normalidad”, esto es, al mantenimiento de los enfoques pre-crisis con algunas modificaciones en las estrategias de marketing que cada empresario ya hacía, para adaptarse a posibles nuevos rasgos comportamentales de un turista marcado por las consecuencias del Covid-19.

El escenario 2, es más movilizador del cambio, en la medida que contempla una recuperación insuficiente de la demanda en relación a los valores pre-crisis, replantea la necesidad de cambiar hacia un nuevo modelo turístico. No obstante, una cultura organizacional meramente reactiva, que sólo aborda el cambio cuando la necesidad de éste se ha hecho más que evidente, hará que la referida transición se produzca lentamente. En consecuencia, estas empresas quedarán rezagadas, de forma que esta falta de ajuste estratégico puede incluso poner en riesgo su supervivencia, lo cual ya hemos visto más veces de las que Suchitoto necesita. Es importante considerar que las inversiones en hoteles y restaurantes son importantes, y por tanto, junto a los empleos que suponen, se deben proteger.

La gran pregunta es si el impacto de esta recesión, los esfuerzos por la supervivencia y la posterior recuperación van a dejar a las empresas del sector con el suficiente capacidad financiera para enfrentar la situación y su adaptación al cambio tecnológico que esta situación impone, clave para la competitividad de las empresas y de los destinos turísticos . Es una apuesta a una revolución tecnológica que puesta al servicio del combate al cambio climático (punta lanza de la preocupación ambiental contemporánea) y de la salud pública (preocupación social que ha vuelto a emerger con singular fuerza como consecuencia del del Covid-19) se deberá convertir en un aliado fundamental. Este es, en esencia, el nuevo modelo al que nos referiremos, con un sector turístico que, apalancado en las nuevas tecnologías, es capaz de contribuir mucho más significativamente a cumplir con las grandes metas que como humanidad debemos asumir para el Desarrollo Sostenible, a las que el Covid-19 no nos puede hacer renunciar, bien al contrario, es la oportunidad de aprovechar la coyuntura.

Percepciones sobre el turismo a cambiar. Una tarea pendiente.

Para muchos habitantes, el desarrollo turístico pasa a lo lejos y les afecta negativamente: “hay veces que las actividades culturales salen caras. No hay pisto. Suchitoto se está poniendo caro. Fíjese que nosotros no podemos ir a los restaurantes donde van los turistas. Muy caros. Hay que hacer más actividades culturales para todos. Necesitamos aquí́ más lugares para trabajar y ganar dinero. Aquí́ la gente se va pues no hay trabajo. Yo creo que nunca es suficiente lo que se hace, hay que hacer más”.

Lo que los pobladores más necesitan es encontrar fuentes de empleo. Se necesita de implementar un plan de desarrollo turístico en la zona el que debe incluir una importante exigencia. Inherentemente a esto, el patrimonio se volverá importante, porque los pobladores lo verán como su fuente de sustento, protegerlo y conservarlo luego de la primera gestión municipal después de 1992, han probado ser tareas que la gente asume ahora con menos dificultad.

Hasta ahora, los programas de desarrollo turístico de la zona, no han logrado vincular a la población como actor principal. Grandes espectáculos de categoría internacional se llevan a cabo en Suchitoto, pero se ha descuidado la formación de valores artísticos en el propio lugar, en este sentido, una exigencia de la población, es la creación de programas estatales o municipales que preparen, descubran y apoyen la formación artística de los habitantes del pueblo. Los habitantes se sienten al margen de los espectáculos, se quejan que nunca son oídos sus puntos de vista y todo parece estar en función no de ellos, sino de los visitantes nacionales o internacionales; esto puede ser una fuente potencial de conflictos, la gente del pueblo debe estar contenta de recibir visitantes y estar dispuesta a servirles.

Parece ser que las exigencias recaen en la población: mantener limpias las calles, pintar las casas con colores suaves, ser hospitalarios y cordiales, etc.; pero se quejan que los beneficios económicos son para un grupo pequeño de propietarios de negocios relacionados al turismo, que ni siquiera son originarios del lugar, y que, en general, consideran a Suchitoto como un lugar del que pueden disponer.  Esta percepción se debe cambiar, ya que los empresarios, cualquiera sea su inversión, pudieron – y pueden- llevarla a cualquier otro lugar.  III y última Parte.

Por Alejandro Gómez

Fotos: Gerson Tobar

Alejandro Gómez Lara, consultor originario de Suchitoto especializado de la Organización Mundial de Turismo OMT en temas de Desarrollo Local y Turismo.