Desde hace 4 años Maya es sol y centro de su universo, pero junto a esa constelación existen otros universos paralelos donde cada día ella va creciendo, aportando y contribuyendo en la construcción de una sociedad más inclusiva para la niñez y juventudes del municipio de Suchitoto.

Para ello, desde hace 5 años todos los días viaja desde la comunidad Zacamil, hasta el casco urbano de la ciudad, para incorporarse y coordinar la Escuela de Artes del Centro Arte para la Paz.  Hablamos de la maestra Ana Yanira Alas, originaria de la comunidad Zacamil II, Suchitoto.

Pero ¿Quién es Yanira Alas?  

Ella responde: Yanira es una mujer comprometida con el trabajo comunitario, educativo y social. Soy una mujer alegre, solidaria, responsable, amigable, luchadora y con muchos sueños y desde siempre he sido una lideresa en mi comunidad. Tengo una hija, se llama Maya…

Maestra de profesión, he desempeñado mi carrera como docente en mi comunidad por algunos años y en otros centros educativos del municipio; hoy en día, soy voluntaria facilitadora del Rincón de Cuentos de la comunidad Zacamil II. Por otra parte, he participado en diferentes espacios dentro y fuera de mi comunidad. Actualmente coordino la Escuela de Arte del Centro Arte Para la Paz.

Siempre he estado vinculada con las artes, creo que es parte natural de nosotras, solo que no nos damos cuenta.  Sin embargo, mi relación más directa con las artes está relacionada con el trabajo que hoy realizo en el Centro Arte para la Paz, ya que coordino la Escuela de Artes con sus diferentes áreas como: música, artes plásticas y áreas vocacionales: inglés, computación, danza, expresión corporal y creación de títeres, Soy Música, artes marciales y otros talleres temporales. Actualmente se están desarrollando con algunos voluntarios y voluntarias el taller de escritura creativa y acuarela.

Recuerdo, que cuando se me dio la oportunidad de coordinar la Escuela de Artes, pensé no soy una artista; sin embargo, soy una mujer de retos y comencé a coordinar los talleres del CAP; cada día aprendo algo nuevo y voy descubriendo mis capacidades y habilidades artísticas.

Mi más grande satisfacción es ver los frutos de los niños y niñas, jóvenes y adultos que participan en los diferentes talleres, es ahí cuando me doy cuenta que mi trabajo ha sido enriquecedor y que mis aportes son significativos para el proyecto.

Al preguntarle sobre la relevancia de este proyecto para el municipio, ella responde: la importancia de este proyecto es que acompaña a la educación formal con procesos que propician: creatividad, motivación, autoestima, participación, convivencia, satisfacción y deseos de superación individual y colectiva, dándoles herramientas que les permitan adaptarse a los nuevos retos.

Yanira enfatiza que el Centro Arte para la Paz es un espacio de oportunidades de formación y crecimiento para la niñez y juventudes de Suchitoto, a través de la Escuela de Arte, donde se desarrollan diferentes talleres. Todos de manera gratuita e impartidos por profesionales y voluntarios. 

En cuanto a la formación formal explica que en el Centro se dan muchos talleres que son complementarios para la curricula educativa que rigen a los Centros escolares, destacando que muchos estudiantes de los talleres que se imparten en el CAP, han logrado sobresalir a nivel nacional e internacional. Yanira señala que para el año pasado el registro de visitantes al museo y estudiantes de la Escuela de Arte sumaron un total de 3,929 beneficiarios/as .

Maya: sol y centro de su universo

Al preguntarle sobre a quienes admira, ella sin dudarlo dice: A mi hija Maya, es muy bella e inteligente, es mi centro y luz, a las mujeres de mi familia porque tienen fuerza e historia; historia que está ligada a la mía y que me inspira para juntas hacer de las luchas un camino más liviano.

Admiro a las mujeres de mi comunidad, a las compañeras de trabajo, a mis amigas; De cada una aprendo y desaprendo. Son un universo.

Al hablar sobre las metas y proyecciones, como encargada de la Escuela de Artes Yanira nos cuenta que  desea seguir llevando estas oportunidades hasta las comunidades, y coordinar talleres y actividades con lideres y lideresas de las comunidades, con directores y directoras de Centros Educativos para que nuestro proyecto siga llegando a más personas que no siempre pueden viajar hasta la ciudad.

 Dentro de sus metas personales desea seguir con su proyecto de costura, aprender a tocar la flauta y seguir formándose en educación inicial y educación artística, así como mantener el espacio educativo Rincón de Cuentos de la Comunidad para que más jóvenes y niños se involucren.

El Salvador, Yanira y la experiencia en Teatro Bread and Puppet

Hace unos meses Yanira viajó a Nueva York, para participar en unas actividades de intercambio cultural con la compañía de teatro Puppet, ella nos cuenta: Bread and Puppet Theater: es una compañía de teatro de marionetas estadounidense creada en 1963, que se caracteriza por combinar en sus espectáculos actores y marionetas gigantes. Tienen una posición y actitud muy crítica políticamente.

El Bread and Puppet de Peter Schumann es un elemento esencial del teatro contemporáneo. Sus desfiles de títeres gigantes y máscaras por las calles de Nueva York o sobre las colinas de Vermont han suscitado una redefinición radical del teatro. La obra de Peter Schumann puede ser delicada u ordinaria, seductora o áspera, llena de oscuros simbolismos religiosos o de titulares de periódico. El compromiso humanista sobre las grandes cuestiones de la comunidad, la autoridad, la injusticia o la paz en el mundo son los principios de la compañía. Su ejemplo ha suscitado en el mundo entero la creación de compañías consagradas al teatro alternativo y al activismo político.

La historia de este grupo y el país, es interesante, en 1984 estaban coordinando para venir hacer un show a El Salvador, pero les recomendaron que mejor no, porque en ese momento El Salvador estaba en guerra y era un riesgo para los actores.

Pasaron los años y en 2019 en conjunto con el colectivo MATRACA a través de la gestión de Ericka Martínez, pudieron venir a El Salvador una parte del equipo de titiriteros a impartir un proceso de formación, coordinado con instituciones locales y personas que trabajaban en el teatro.

Entre sus múltiples producciones, la compañía actualmente presenta un performance sobre la vida peregrinación y muerte de San Romero.

En el año 2019 que vinieron a impartir el proceso aquí en Suchitoto, abrieron la Posibilidad de ir a Glover Vermont, que es el lugar donde ellos residen. Con una carta de invitación gestioné la visa americana, y estuve del 4 al 30 de agosto 2022.

De esta manera en el 2022 se me dio la oportunidad de viajar y participar en este gran proyecto; mi experiencia fue muy gratificante y enriquecedora, ya que participe en los performances, colabore en las tareas diarias de la casa, apoye en la cocina, recogí manzanas, participe en los pasacalles que pueblos aledaños solicitan, apoyé en el taller de grabado y pintura. Una de las situaciones más difíciles para mí, fue el idioma, sin embargo, esto no fue ningún obstáculo para disfrutar y aprender.

¿Qué significó para ti participar de esta actividad con esta compañía? Bueno significó mucho ya que aprendí a trabajar en equipo y a vivir en comunidad, a respetar la diversidad de género, algo que me gustó muchísimo es que tienen especial amor por el agua, la tierra los alimentos, las plantas los animales. Es increíble el nivel de conciencia que hay.

Actualmente estoy desarrollando algunos talleres elaboración de máscaras con papel maché, que es una técnica, muy fácil y práctica para crear títeres de pequeños y grandes formatos. Utilizando técnicas que aprendí con ellos en cartón maicena como base.

¿Puedes contarnos sobre la experiencia de Erika Martínez en esta compañía? Ella es una joven de la comunidad El Bario, participó y se formó por muchos años en ESARTES. Luego estuvo en el colectivo MATRACA, además coordinó y fue maestra de Expresión Corporal de la Escuela de Arte del CAP.

Actualmente se encuentra en la compañía Puppet, siendo parte del equipo coordinador, y participando en los performances y en las giras que la compañía realiza dentro de los Estados Unidos.

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Esta es parte de la labor y aporte de Yanira Alas que, -como muchas otras grandes mujeres de Suchitoto-, todos los días se arman de alegría y entusiasmo para dar su aporte en la construcción de espacios para el aprendizaje y sana convivencia de la niñez y juventudes en Suchitoto.

Al terminar la entrevista Yanira desea de manera especial dar un agradecimiento a: Hermana Peggy, ella es la que confió en mi para que pudiera ejercer mi rol en esta área de trabajo, también a todo el equipo de CAP, por qué nos organizamos bien para que los objetivos se desarrollen de la mejor manera y se obtengan buenos resultados.

Agradezco también por la oportunidad que se me dio de poder, participar en la compañía de teatro y la confianza de las y los maestros de CAP.

Creo que los procesos de formación siempre dejan algo bueno en los diferentes ámbitos en los que la persona se desarrolle. Dan oportunidades y te abren puertas para conquistar las metas propuestas y luego compartirlo con todos y todas.

Fotos cortesía: Yanira Alas y Centro Arte para la Paz.