164 años han transcurrido desde que aquel 15 de julio Suchitoto pasó de ser una villa a convertirse en una ciudad. Año con año, este suceso ha sido motivo de grandes celebraciones y durante todo el mes se honra su fundación con actividades artísticas y culturales que bien que hacen honor al título “la capital cultural de El Salvador”.
Por años, cada 15 de julio hemos visto los desfiles estudiantiles que engalanan a la ciudad, donde cada centro escolar ha preparado su regalo a Suchitoto: bailes, melodías, disfraces y muchos colores, todo aquello que va marcando y haciendo única cada festividad en honor a la ciudad. Despertar con cañonazos y degustación de atoles también es parte de una tradición que, con los años, se ha mantenido entre la población y, por tanto, se resiste a ser olvidada.
Innumerables son los recuerdos sobre esta festividad y cada habitante del municipio, sin duda, resguarda en su memoria aquellos más preciados, algunos, con suerte, logran conservar fotografías antiguas que detienen en el tiempo los aniversarios. Para conocer más sobre los aniversarios y celebraciones de la ciudad conversamos con Gezabel Chávez, maestra normalista desde 1961 hasta 1992, y promotora de la cultura y las artes entre los estudiantes; actualmente habita en el barrio El Calvario, Suchitoto.
¿Cómo se celebraban los aniversarios de antaño en Suchitoto?
“Esto tiene remembranzas desde el año 1958, cuando un hombre visionario, como fue don Alejandro Cotto, estando en México decidió venirse a su pueblo para celebrar los 100 años que Suchitoto cumplía por haber sido declarada ciudad, nombrada por Gerardo Barrios”. Para ese tiempo Gezabel era una estudiante normalista y tuvo la oportunidad de participar en “los tres días más grandes que Suchitoto ha tenido”, así lo recuerda. Para la celebración del centenario de Suchitoto, los barrios se vistieron con los colores que les distinguen.
¿Las mujeres tenían alguna participación especial durante los aniversarios?
“Las mujeres no estábamos organizadas así como están ahora las de la Casa de las Mujeres, éramos un bloque femenino y masculino sin decir aquí están las mujeres (…) yo participé en los desfiles escolares, y la primera reina que se tuvo de ese evento fue Berta Jiménez, una mujer que representó dignamente nuestra ciudad”, menciona.
En su relato, Gezabel, nos cuenta el significado de cada símbolo y color de los barrios. El barrio La Cruz da la bienvenida a los turistas que visitan al municipio, “tiene asignado el número 1 porque abre las puertas de Suchitoto. Su color es el amarillo y el símbolo es la llave”. El siguiente barrio es Concepción, “de color verde, su símbolo es la canasta de frutas. Era la entrada de toda la producción que teníamos antes que se llevaran las mejores tierras de cultivo”.
San José con su color azul “y una estrella que significa la sabiduría porque ahí nacieron los centros escolares con los que arranca Suchitoto”. Barrio El Calvario es de color morado y su símbolo es una cruz. El Centro es rosado y posee como símbolo una rueda que “es la que mueve la industria y el comercio”. Por último, nos habla del barrio Santa Lucía “su símbolo es una rosa y su color es el blanco porque simboliza la pureza de la patrona que lleva su nombre”.
El 15 de julio de 1958, la Asamblea Legislativa nombró a Suchitoto Capital de El Salvador. “Tuvimos la suerte de que viniera toda la Asamblea, los tres cuerpos diplomáticos de nuestro país y el presidente José María Lemus, el cual tuvo la reunión general en el atrio de la iglesia”. A las 12:00 m. d. de ese mismo día, después de que las escuelas que habían desfilado “con toda la elegancia del lugar”, recuerda Gezabel, “se dejaron ir cien palomas de la torre de la iglesia”, este es uno de los momentos que Chávez menciona con más emoción.
Dice, también, que en la celebración del centenario hubo bailes en un casino y en la casa donde ahora es el centro escolar Ana Dolores Arias se tuvo un almuerzo de gala, “se trajeron flores desde Costa Rica para adornar las mesas con belleza y engalanar así a los visitantes que tuvimos el agrado de tener. Fue algo maravilloso, algo sensacional y desde aquel entonces esa fecha ha quedado como un símbolo para nuestra ciudad”, agrega Gezabel.
Según la narración de Gezabel, en el festejo de los 100 años de la ciudad, se inauguró el parque centenario que hoy es conocido como la plaza central de Suchitoto, “y lastimosamente ya dejó de llamarse así, desaparece porque los jóvenes no conocen esa historia, solo nosotros los mayores tenemos el honor de decir aquí está el parque centenario”. También fue inaugurado el mercado municipal. Dos obras en honor a la fecha.
En la conversación que la Gaceta Suchitoto sostuvo con Gezabel, hizo mención sobre la bandera y el escudo de la ciudad, diseñados por don Alejandro Cotto. “El pabellón tiene 29 rosas de oro porque éramos 29 cantones antes del embalse. El escudo tiene una gran S que significa Suchitoto y el recorrido que el río Lempa hacía (…) se dice que Suchitoto es un pequeño Estado porque tenemos los tres símbolos: el pabellón, el himno y el escudo que nos engalanan”.
¿Cómo eran los aniversarios antes y después de la guerra?
“Antes de la guerra todos nos preparábamos como estudiantes para el gran desfile, venían bandas regimentales, orquestas, se hacían bailes de lujo en la alcaldía y en el casino, y la gran alborada. En el tiempo de la guerra lastimosamente solo se cantaba solo por hacer una simbología, desfilábamos los pocos centros escolares que estábamos pero nunca se perdió esa idiosincrasia que tenía Suchitoto.
Por la guerra, fuimos tres centros los que quedamos nada más, yo estaba como maestra activa, éramos el grupo escolar, Ana Dolores Arias y escuela Bonilla. Desfilamos con un poquito de alumnas pero sí se cantó siempre lo que es el himno nacional, nuestro himno a Suchitoto, izamos los dos pabellones, el de El Salvador y el de Suchitoto”, cuenta.
¿Cree usted que sería importante bautizar a las calles de Suchitoto con nombres de personas que han aportado a la vida social y cultural del municipio?
“Hubo un momento que se tuvo esa noción (…) es necesario porque aquí se desconoce que hemos tenido poetas, como Juan Cotto, tenemos médicos, el primer médico que hizo la operación en el hospital Rosales fue Manuel Gallardo, que vivió en Concepción.
Lo que usted me dice es correcto, sería bueno que las calles fueran nombradas de esa manera, que tuvieran nombres representativos para que los niños se fueran concientizando de aquello por qué lleva el nombre y que los niños participaran más en cosas propias de nuestra ciudad, este es el momento, esta fecha es importante para despertar el amor a esto”, enfatiza Gezabel.
¿Qué debería significar para la niñez y juventud celebrar un aniversario más de Suchitoto?
“Si queremos llenar a nuestra juventud del amor al terruño, aquí se tiene que comenzar, el amor está aquí. Que aprendan a querer a su ciudad. ¿Qué tiene esto de importante? La importancia es el terruño y ver el logro que Suchitoto ha tenido y que ahora es una cabeza cultural, ya es la capital cultural de El Salvador, nombrada por un embajador de Brasil. En el municipio han predominado los eventos culturales y por eso ese título”.
¿Hay algo que desee agregar?
“Agradezco a las instituciones que han tenido aquel deseo de seguir luchando por conservar estas fechas, comenzando por todos los estudiantes, maestros, Casa de la Cultura, la Gaceta que está promocionando todo esto, los felicito y ojalá se continúen para seguir creciendo en el patrimonio municipal; ojalá que todas las instituciones, alcalde, maestros y todos los ministerios que están fungiendo con sus labores se incorporen a esta fecha y que la disfruten y que la sigan propagando para las futuras generaciones”, finaliza Gezabel.
Por Carolina Mena
