Interesados en dar seguimiento a los trabajos de remoción de la ninfa del lago, nos trasladamos hasta el Puerto San Juan, lugar donde se han centrado las principales acciones para retirar la ninfa que ha invadido casi un 70% de del principal humedal con categoría RAMSAR que tiene El Salvador.

La tranquilidad y la paz del canto de las aves que habitan el Lago Suchitlán hoy es interrumpido y se mezcla con el ruido de las máquinas y el abrazo del sol que acompañan a un grupo de hombres y mujeres que luchan arduamente – desde hace dos meses- por sacar la ninfa que cubre la superficie del embalse.

Son alrededor de 40 personas de las cercanías de este espejo de agua artificial.  Aquí están presentes personal de la Central Hidroeléctrica del Río Lempa CEL, del Ministerio del Medio Ambiente MARN quienes junto al Fondo de Inversión Ambiental de El Salvador FIAES se han unido para extraer el jacinto de agua que ha cubierto casi todo el embalse y tiene preocupada a las poblaciones aledañas.

Estos trabajadores están divididos en dos grupos: por un lado, trabaja una cooperativa de pescadores y pescadoras organizadas, con el personal de CEL y por el otro, un grupo más pequeño de lancheros, trabajan en conjunto con el MARN y FIAES.

La principal labor es extraer la ninfa. Para ello la ninfa es sacada de manera artesanal, es decir que literalmente se esta sacando en su mayoría con las manos, para ser cargadas en lanchas y luego ser llevadas hasta la orilla para que posteriormente sea cargada en la maquinaria que la lleva a un terreno aledaño donde está siendo apilada. Desconocemos si existe algún plan de tratamiento de todas esas plantas de ninfa que se están extrayendo de las guas del embalse.

En el paisaje de las aguas frente al puerto sobresale una línea trazada, que divide las aguas liberadas y las aguas cubiertas por la ninfa. Esta se ha colocado por iniciativa de los lancheros, quienes han puesto un cable con varas de bambú, con el propósito de evitar que la ninfa se desplace al lugar que está liberado.

Al acercase y rozar la ninfa o lirio de agua, inmediatamente una nube de mosquitos y zancudos se levanta y salen de entre sus hojas. Este es uno de los principales problemas por los que mayormente se ha quejado la población, la cantidad excesiva de mosquitos, zancudos y hasta congas, que están afectando a toda la población aledaña sin excluir niños, niñas, mujeres, hombres y personas de la tercera edad.

“Nosotros solo estamos esperando que haga mucho viento fuerte, para que la ninfa se vaya para otra parte, porque es difícil poder sacar toda esta ninfa”, dijo Don Antonio, lanchero de la zona; quien también mencionó que desde hace dos meses, exactamente desde que Suchitlán se vio invadido por la ninfa, los pescadores han dejado de ejercer la pesca. Además, agrega que algunos de ellos pagaban trasporte para que trasladaran sus canoas a otros lugares donde la cantidad de ninfa fuera menor y poder realizar sus actividades pesqueras. “El turismo también se ha visto afectado” -mencionó- “los turistas llegan a la zona, pero ya no se puede salir con viaje”

Todos los lugareños reconocen que por primera vez, en todo este tiempo, la cantidad de ninfa ha sido mayor que en años anteriores, extendiéndose también el lapso de tiempo que ha habitado en el embalse. El objetivo principal de extraer el mayor porcentaje de ninfa es para que pueda llegar oxígeno a la vida acuática que habita en las profundidades del lago, a fin de evitar la mortandad de peces.

Pese a la gravedad del problema, uno de las cosas sobresalientes de nuestra visita es no encontrar en el lugar personal de la Alcaldía que estuviese colaborando o participando de las actividades de remoción y limpieza de la ninfa. Por otra parte,  desconocemos si en las riberas de los demás municipios se realizan actividades de limpieza o remoción de la ninfa.

Por el momento las acciones se han centrado únicamente en las riberas del Puerto San Juan Suchitoto, el principal sitio de interés turístico del embalse y principal ventana para apreciar el embalse.

Ante esta situación ¿Realmente la población está consciente del peligro en el que se encuentra el lago Suchitlán? Mas allá de la ninfa y sus consecuencias ¿Aún es tiempo de poder hacer algo y tomar las medidas necesarias para frenar la contaminación que existe en el embalse? Yendo más allá de poner el grito en el cielo y culpar a las autoridades ¿Qué está dispuesto a hacer usted para contribuir a salvar el Lago Suchitlán?

Dejamos estas interrogantes para generar reflexión y conciencia en la población, sobre este problema que hoy nos afecta en forma de vectores de zancudos y moscas e imposibilidad de pesca y navegación, pero que en unos años sus efectos serán irreparablemente más drásticos y negativos para el medio ambiente, la salud y la vida productiva del municipio y el país.

Texto y fotografías: Carolina Mena