Se ha preguntado ¿Cuánto dinero requiere mantener vivo el arte y cultura en el municipio? o yendo más allá ¿la cultura es un gasto o una inversión en Suchitoto?

Suchitoto cuenta con más de 7 proyectos dedicados a la enseñanza y la promoción de las artes y la cultura, entre ellos: Casa de la Cultura, Casa Museo Alejandro Cotto (Centro Cultural Salvadoreño Amerticano), Teatro Alejandro Cotto (Patronato pro Restauración Cultural Suchitoto), Esartes, Centro Arte para la Paz, Casa Clementina y la Alcaldía Municipal entre otros. A esto hay que sumar una serie de eventos y actividades culturales y artísticas, que hacen de la cultura una actividad viva en el pueblo. Por eso, bien vale la pena preguntarse de dónde y cómo se sostienen estas iniciativas en el municipio.

Con un panorama nacional donde el presupuesto para cultura no llega ni al 1.0% del PIB, es importante preguntarse ¿cómo se sostiene la vida cultural del municipio?

Veamos y hagamos un ligero balance y sondeo de las organizaciones encargadas de la cultura en Suchitoto.  Cada una de estas, entidades de forma individual tienen gastos que pueden incluir arrendamiento de local, mantenimiento, personal de administración, coordinadores e instructores, entre otros gastos fijos.

Por otra parte, está la actividad cultural, donde cada evento por pequeño y modesto que parezca, incluyen una serie de costos extras que abarcan recursos de logística, publicidad, transporte y atenciones o reconocimientos a los participantes, entre otros.

Si contabilizáramos y reuniéramos todos estos saldos, tendríamos una inversión media en temas de cultura no menor a $20,000 mensuales*. Es decir que el municipio de Suchitoto tiene una actividad económica generada por el trabajo en temas de cultura bastante significativa, generando alrededor de unos 40 empleos directos, sin incluir la participación de voluntarios y gastos de los y las estudiantes y participantes en los talleres y eventos culturales, además y aparte esta toda la actividad económica colateral que generan.

De modo que quien diga que la cultura no tiene y juega un papel importante en Suchitoto debe revisar bien los números y empezar a investigar un poco más.

Si bien es cierto que el principal objetivo ni la forma de medir el desarrollo del arte y la cultura sea la actividad económica, también es cierto que esta puede tener y tiene un importante impacto en la economía del municipio.

Esto nos lleva a entender que el impacto del arte y la cultura puede medirse en dos dimensiones:  un valor social simbólico e intangible y otro valor tangible para el desarrollo socioeconómico del municipio.

El valor simbólico, patrimonial o ancestral que la cultura representa para el individuo que la práctica, es el que transforma vidas, el que sensibiliza y eriza la piel, y ese no se puede medir o ¿Cómo se mide el efecto que tiene una canción para una persona? ¿Cómo medimos lo que siente alguien cuando baila? ¿cuándo ve una pintura? o ¿lee un libro? Ese efecto que toca todos sus sentidos y emociones llega a ser en algunos casos indescriptible, siendo este la esencia y el gran valor que viven y comparten quienes consumen y disfrutan de las diferentes expresiones artísticas y culturales.

Y por otra parte está el valor agregado que aporta al desarrollo de la economía local y el turismo. Una muestra clara de esto es el Festival Internacional de Arte y Cultura que se celebra anualmente, en donde su constancia por casi 30 años ha contribuido a propiciar escenarios que promueven la convivencia e incluso el desarrollo de un ecosistema cultural.  Donde a partir de esta experiencia, han surgido otros festivales que fortalecen la vida cultural en la ciudad.

En principio no debería esperarse un retorno económico a partir de la inversión en cultura. Aun así, las iniciativas que privilegian el componente cultural como factor de desarrollo logran un detonante de transformación en su entorno: se convierten en puntos de encuentro que facilitan el diálogo, atrayendo el turismo al pueblo, haciendo visibles, accesibles y públicas la ciudad y las expresiones del arte, artistas, sentimientos, intereses y sueños de una comunidad, fortaleciendo de este modo el tejido social y estimulando la construcción de capital social.

Lo cierto es que, cada vez resulta mas difícil conseguir dinero para mantener el ritmo de la vida cultural, y quienes aportan fondos quieren ver crecimientos y avances significativos, señales que muestren que su inversión va en alguna dirección y esta impulsando el desarrollo socio-económico del municipio.

La cultura cuesta dinero, hemos dicho en otras ocasiones. Y frente a la precariedad de recursos es inaceptable que, a la fecha, esta ciudad con una tradición cultural no sea capaz de sentarse a construir una ruta de crecimiento cultural articulada, donde el arte y la cultura puedan verse como una apuesta de municipio, o si no ¿hacia que puerto se dirige el arte y cultura en Suchitoto?

Porque este sigue siendo el gran talón de Aquiles de Suchitoto: la falta de voluntad para sentarse a dialogar por parte de los encargados de la cultura local. Mientras no se logre esta alianza de coordinación para una planificación cultural conjunta se continuará (en la dimensión económica) haciendo quiza un gasto en activismo cultural y no una inversión mas inteligente en el desarrollo cultural del municipio.

md/

Fotografía: Gerson Tobar

*Estos datos están basados en estimaciones. La mayoría de organizaciones no comparten ni hacen pública esta información.