Vivimos en un mundo cambiante, donde la tecnología y el desarrollo exigen adaptarse en un mundo desigual de oportunidades y privilegios. Es en este mundo donde las mujeres rurales deben de sobrevivir, adaptándose y rompiendo en muchas ocasiones rígidas formas mentales de solucionar viejos problemas y patrones para encontrar nuevos recursos y formas de hacer, que las ayuden a superar las exigencias de estos tiempos.

En medio de un mundo patriarcal,  las mujeres rurales deben enfrentar el desafío que consiste en adelantarse, imaginar y diseñar los escenarios del futuro con ideas y proyectos alternativos que les permita sobrevivir y convivir con dignidad.

El reto es ser innovadoras e ir dos pasos adelante del resto, porque si bien en el municipio existen grandes progresos y logros en términos de mujeres lideresas participando en espacios de tomas de decisiones comunales y municipales, se deben seguir creando condiciones para el empoderamiento de las mujeres y abriendo espacios de visibilización y participación para las mujeres rurales de nuestras comunidades en igualdad de condiciones.

Creemos que se debe seguir trabajando y apostando por la sororidad y el trabajo en colectividad desde la organización. Trabajar en colectividad llevará no sólo a incrementar los rendimientos sino a conocer, valorar y manejar las demás variables de la actividad rural y comunitaria.

Se debe insitir para entender que las comunidades no pueden progresar en forma aislada, el progreso debe darse en forma conjunta con quienes trabajan la tierra, con las productoras y con el lugar en que cada una se desenvuelve y pertenece.

Se debe ser conscientes de la enorme responsabilidad como fuerza generadora del cambio, a partir del papel que desempeñamos en la organización básica que es la familia y el liderazgo en la comunidad.  En tal sentido se debe romper con la visiones patriarcales y luchar por hacer valer y defender los derechos como mujeres rurales que aportan a la sostenibilidad del municipio.

Debemos mantener la lucha por mejorar el nivel de vida en zonas rurales y exigir condiciones dignas de salud, educación, cultura, con acceso a oportunidades de crecimiento de condiciones económicas, como un ascenso en la condición social.

Las mujeres de Suchitoto han aprendido a mirar la vida de frente y sabiendo que el trabajo tiene un sentido más amplio, desde la necesidad de contribuir al equilibrio del presupuesto del hogar -donde muchas veces son la única fuente de ingreso-, hasta la seguridad de la independencia económica.

Para logar  esta independencia económica se requieren oportunidades para  incorporarse al proceso social como personas económicamente activas, aptas para desempeñar con eficiencia, cualquier tipo de actividad.

El desarrollo agropecuario en el campo no depende exclusivamente de factores económicos sino también de la existencia de una población agrícola instruida, con acceso al conocimiento, capaz de tomar sus propias decisiones y asumir sus responsabilidades de manera creativa. Debemos dar crédito al papel clave que cumple la mujer en las diferentes etapas de la producción de alimentos y en la agricultura en general.

Las mujeres en las comunidades deben tratar de buscar soluciones a los problemas de manera colectiva, compartiendo saberes y experiencias, buscando actualizarce y adquirir nuevos conocimientos y formas de resolver los retos.

La realidad nos muestra que aparte de la desigualdad social de carácter estructural, aún persiste la falta de equidad en el acceso al empleo, el poder, la toma de decisiones en todas las estructuras jerárquicas y la debilidad de los mecanismos de promoción del adelanto y los aportes de la mujer.

Cada vez, mayor número de mujeres sufren dificultades derivadas de la recesión  económica, del deterioro de las condiciones de la vida rural, de la desaparición de sus negocios agropecuarios, absorbidos por las grandes granjas o empresas;  las sequías, la falta de acceso al agua potable y energía eléctrica, son situaciones que crean mayor vulnerabilidad y se añaden a su tradicional falta de acceso  a las oportunidades de desarrollo.

Es de destacar los esfuerzos municipales y de organizaciones de mujeres hacia el sector agropecuario brindando apoyo a las mujeres rurales con pequeños proyectos agrícolas y de granja, proporcionando estímulos por la vía de créditos, con la provisión de insumos, asistencia técnica, y capacitaciones. Sin embargo tomando en cuenta la alta población de mujeres en la producción rural, se debe seguir trabajando para mejorar y llegar a todas las comunidades.

Si bien no existen datos o estadísticas específicas que permita cuantificar el aporte de la mujer del campo a la producción rural en Suchitoto, la experiencia de las organizaciones de mujeres hacen referencia a que un porcentaje elevado de  mujeres que participan  en la actividad agropecuaria ha ido progresivamente desarrollando tareas y responsabilidades que en otros tiempos estaban reservadas sólo a los hombres.

La falta de consideración de estos hechos, hacen en muchos casos dejar a las mujeres al margen de los beneficios de políticas y beneficios que están destinados a los hombres, pasando por alto la magnitud del  aporte económico de las mujeres.

Tradicionalmente la actividad agropecuaria se ha centrado en la atención del “productor” como sujeto principal. La interpretación de productor ha sido literal, en el sentido de prácticamente desconocer el papel preponderante que juega la mujer en el medio rural, ignorando el aporte de las mujeres a la economía o la agricultura con las labores domésticas y de cuidado.

Por eso consideramos que en el marco del dia de la mujer rural, se debe promover el reconocimiento y la búsqueda de nuevos mecanismos que incorporen plenamente a la mujer en la vida económica del sector rural.  Se deben proponer nuevas y creativas estrategias de apoyo a las mujeres rurales,  servicios de asistencia técnica, productiva y comercial, capacitaciones, créditos, investigaciones de desarrollo,  infraestructura y  tecnologías apropiadas, podrían contribuir a mejorar las condiciones y oportunidades de las mujeres rurales en el municipio.