Gracias al esfuerzo de muchas mujeres, desde hace un par de décadas tenemos la posibilidad de empezar a descubrir otra parte de la historia, la de mujeres que han sido invisibilizadas por sistemas patriarcales durante siglos. Las mujeres además de su aportes para sostener la vida ejerciendo roles cuidadoras, han realizado una importante labor en el desarrollo político, científico, social, cultural y económico que, la historia «- escrita por los hombres -» ha invisibilizado desde siempre.
La participación de las mujeres en la historia contemporánea de nuestro país y municipio ha sido oculta, mancillada y silenciada siendo esto evidente en los pocos textos dedicados al tema. Los cambios logrados han sido gracias al movimiento de mujeres y feminista, que poco a poco han venido permeando y abriendo espacios para reconocer sus historias, sus nombres y sus luchas hasta hacerlas escuchar.
En el marco de la conmemoración del 8M – Día Internacional de la Mujer, es necesario exigir y demandar nuestros derechos. El asumir y reconocer que la historia también ha sido escrita por mujeres da un lugar en la línea de tiempo, las reivindica y las reconoce como sujetas de derecho. Desde la Gaceta Suchitoto, se reconoce la importancia de contribuir a visibilizar el trabajo de las mujeres en sus diferentes facetas y trabajos dentro de sus comunidades y en el municipio.
Existen pocos documentos que cuenten la historia de las mujeres a nivel local, hay algunos testimonios y memorias de mujeres en informes, entrevistas o libros. Un espacio que mostró en el 2015 algunas historias de mujeres fue el Museo la Memoria Vive, con el objetivo de visibilizar el trabajo de las mujeres en el mundo, el país y en Suchitoto. Por esta falta de información se considera necesario e importante dar a conocer las visiones de las mujeres, sus opiniones, los esfuerzos, sus nombres, los hechos, sus triunfos y luchas con las cuales se puede construir el tejido de la memoria, evidenciando las aportaciones realizadas a lo largo de la historia del municipio.
Reivindicar los derechos de las mujeres implica incidir en múltiples escenarios, por ello, cambiar la forma de ver la historia y a sus protagonistas es fundamental para modificar las nociones y pre-concepciones sobre las mujeres, su papel en el pasado y el papel actual en las sociedades. Es importante reconocerlas como dueñas de su tiempo y su futuro, pero sin dejar de ver hacia atrás para reconocer los aportes que han dado otras mujeres para que hoy en día se gocen de derechos que en otros tiempos se negaban.
Todas son importantes, no importa el origen, donde viven, época, estudios, oficios, ocupaciones, color, etnia, entre otras. Reconocerse como mujeres diversas en pensamientos, ideas, orientaciones gustos, deseos, pero siempre creando movimiento juntas y unidas. Se debe comprender que en la colectividad, organización y participación se encuentran los caminos para alcanzar las metas y reconocimientos.
Por ello es importante compartir, contar y escribir la historia desde abajo, desde las comunidades, dando a conocer el aporte y participación directa de las mujeres en la familia, en las luchas sociales y colectivas, por el acceso al agua, al territorio, a la defensa de los derechos de las mujeres, de la salud, la educación, los derechos sexuales y derechos reproductivos; más allá del papel culturalmente asignado como madres y cuidadoras.
Se necesita reconocer y destacar el proceso organizativo a través de los diferentes colectivos de mujeres, que lideran una lucha de resistencia en la defensa y cumplimiento de los derechos de las mujeres. Esto será posible en la medida que enfrente el reto de compartir, contar las historias no contadas de las mujeres.
