La reciente aprobación de la Ley de Agentes Extranjeros por parte de la Asamblea Legislativa, impulsada por el Ejecutivo, marca un antes y un después en la relación entre las organizaciones sociales y el Estado salvadoreño. Esta legislación, que obliga a toda entidad que reciba financiamiento del extranjero a entregar el 30% de sus ingresos al Gobierno Central, amenaza con desmantelar décadas de trabajo comunitario en los territorios. Suchitoto, uno de los municipios con mayor historia organizativa, no es la excepción.
Pero más allá del debate nacional e internacional, ¿cuáles serán los impactos reales y concretos de esta ley en lugares como Suchitoto?
Suchitoto es reconocido por su labor y actividad cultural, organizativa y comunitaria. Durante décadas, organizaciones no gubernamentales, asociaciones culturales, grupos de mujeres, colectivos juveniles, ADESCOS, iniciativas educativas y entidades de cooperación han sido el principal motor que ha dinamizado y sostenido el desarrollo local, especialmente en aquellos lugares o sectores donde el Estado ha estado ausente. Muchas de estas organizaciones han hecho enormes aportes a Suchitoto y funcionan gracias a fondos internacionales de cooperación, recibidos en formas de becas, donaciones y voluntariado extranjero.
Bajo esta nueva ley, todas estas entidades estarán obligadas a registrarse como “agentes extranjeros”, lo cual estigmatiza su labor al insinuar que responden a intereses externos, aun cuando su trabajo en el territorio ha estado siempre al servicio de las necesidades locales. Este etiquetado no solo implica barreras legales y administrativas, sino también un fuerte riesgo de criminalización y desprestigio ante la comunidad.
En tal sentido es muy importante entender ¿Quiénes se verán afectados en Suchitoto? Dentro de los proyectos que podrían resultar afectados y hacen una labor social en Suchitoto pudiéramos enumerar a:
Organizaciones de derechos humanos y memoria histórica, que han acompañado a víctimas del conflicto armado y luchan por mantener espacios de reflexión y concienciación.
Colectivos de mujeres que promueven la equidad de género, el empoderamiento económico, la soberanía alimentaria y la prevención de la violencia hacia las niñas y mujeres.
Grupos juveniles, que han promovido la cultura, el arte, la educación alternativa y la prevención de la migración y la violencia a través de las artes.
Espacios culturales y artísticos, que dan capacitaciones gratuitas y han hecho de Suchitoto un referente de arte y cultura viva.
Asociaciones, Sistemas de agua y grupos ambientalistas, que han protegido y defendido el agua, el territorio y los bienes naturales comunes de la comunidad.
Todos estos actores locales —muchos de ellos sostenidos con el apoyo de la cooperación internacional— podrían ver limitada su capacidad de acción, trabajo e incluso podrían desaparecer si la carga fiscal y legal los obliga a cerrar sus operaciones.
Lo que esta en riesgo
En un contexto de creciente centralización del poder y cierre de espacios públicos, la labor de las organizaciones ha sido clave para sostener procesos educativos, culturales, sanitarios, sistemas de agua, salud reproductiva, y de fortalecimiento comunitario. El trabajo que han hecho ha sido profundamente humano, solidario y comprometido con el bienestar en beneficio de las comunidades.
Las organizaciones han entregado becas, formación técnica, talleres de arte, prevención de violencia, acompañamiento psicosocial, alfabetización digital, soberanía alimentaria, agroecología, reforestación, acompañamiento a víctimas de violencia de género, nuevas tecnologías para sistemas de agua, entre muchas otras acciones que han transformado vidas, especialmente de niñez, juventudes, mujeres y personas mayores en situacion de vulnerabilidad.
Ante este panorama, existe la enorme posibilidad que las agencias de cooperación retiren su ayuda financiera al país, frente a restricciones que lejos de incentivar el apoyo a las comunidades les amenaza con impuestos por ayudar. El futuro inmediato es incierto y preocupante. Probablemente algunas organizaciones se tendrán que debatir entre cerrar operaciones o intentar sobrevivir con menos recursos y más obstáculos. Sin duda se harán esfuerzos por sostener los proyectos e iniciativas hasta donde se pueda, pero eso limitará su capacidad de incidir y crecer.
Sin embargo, en este contexto, el riesgo mayor es que Suchitoto pierda ese entramado de solidaridad, esas redes de creatividad y compromiso que han hecho de este pueblo un referente de organización social. Lo más triste es que el vacío que puedan dejar estas organizaciones no será llenado por el Estado, que ya ha mostrado su falta de voluntad para promover y garantizar derechos culturales, sociales y económicos en el territorio. La mejor muestra de todo esto es la precariedad de fondos en la que se encuentran las municipalidades en los territorios.
Ante este panorama, es urgente que la población reflexione, se informe y se organice. No se puede permitir que se desmantele la red de apoyo construida durante décadas con esfuerzo, solidaridad y compromiso. La defensa de las organizaciones no debe quedar solo en manos de quienes las dirigen. Las comunidades deben levantar la voz, exigir condiciones justas para que estas entidades puedan seguir operando.
La historia de Suchitoto es una historia de lucha, memoria y dignidad. No puede permitirse que, se borre el trabajo de quienes han caminado con las comunidades en los territorios. La defensa de las organizaciones sociales es también la defensa de nuestros derechos, de nuestra historia y de nuestro futuro.
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LEY DE AGENTES EXTRANJEROS (Resumen)
La Ley de Agentes Extranjeros establece un régimen jurídico y tributario para las organizaciones que reciben financiamiento del extranjero, imponiendo un impuesto del 30% sobre las donaciones y creando un registro obligatorio para los agentes extranjeros.
Propósito de la Ley
La Ley de Agentes Extranjeros, aprobada el 20 de mayo de 2025, tiene como objetivo promover la transparencia en las operaciones financieras de las organizaciones que reciben fondos de personas o entidades extranjeras. La ley establece el régimen jurídico aplicable a las personas naturales o jurídicas, nacionales o extranjeras, cuyas actividades en El Salvador respondan a intereses, o sean financiadas directa o indirectamente, por una persona extranjera. Busca garantizar que los ciudadanos conozcan las actividades de estos agentes y proteger la seguridad y soberanía nacional de El Salvador.
Implicaciones Fiscales
Impuesto del 30%: Se aplicará un impuesto del 30% sobre todas las transacciones financieras provenientes de fondos extranjeros, incluyendo donaciones y pagos. Este impuesto se destinará a obras sociales.
Registro de Agentes Extranjeros (RAEX): Todas las organizaciones que reciban fondos del extranjero deben inscribirse en el RAEX para operar legalmente. Este registro es administrado por el Ministerio de Gobernación.
Obligaciones de los Agentes Extranjeros
Registro Obligatorio: Las entidades deben registrarse en el RAEX dentro de un plazo de 90 días desde la entrada en vigor de la ley. El incumplimiento puede resultar en sanciones, incluyendo la cancelación de la personería jurídica.
Prohibiciones: Las organizaciones registradas no podrán realizar actividades políticas ni aquellas que alteren el orden público o amenacen la seguridad nacional.