En el 2017 descubrimos en la internet un hermoso proyecto que se estaba gestando desde la comunidad de Milingo, por una emprendedora mujer dedicada al bordado artesanal en Suchitoto. Así conocimos a Cecybel Borjas una creativa emprendedora que desde su proyecto en CandyKuilt  a venido proponiendo y luchando por ubicar dentro de la moda actual las confecciones en bordado y telas originarias.

CandyKuilt  es una muy hermosa propuesta afincada en el rescate del bordado artesanal que por varios años Cecybel a intentado y luchado por ubicar en el mercado local, nacional e internacional.

Casi 4 años después, hemos vuelto a contactarle, para saber cómo va el proyecto en medio de una crisis que deja su huella y secuelas más profunda en los pequeños negocios emergentes del municipio. Lastimosamente, muchos pequeños negocios como el de  Cecibel Borjas, están a la espera de un milagro para poder resurgir.

Cecibel, hace 4 años conversamos sobre un maravilloso emprendimiento que usted impulsa desde la comunidad Milingo. ¿puede recordarnos de qué trata su emprendimiento y cómo comercializa sus productos?

Bueno tal como les contaba, en aquellos años, CandyKuilt, es una pequeña empresa que se dedica a la confección de prendas de vestir con bordados en variedad de telas, hilos, listones y más. Me di cuenta que la ropa bordada de La Palma tenía algunas debilidades y entonces decidí que yo podría crear mis propios bordados y mejorar el producto. Las artesanías de La Palma salieron a la luz por los dibujos del artistas Fernando LLort  quien dio a conocer e impulso las artesanías de ese lugar. Así que en el 2014 empecé en realizar mis propias piezas con bordado más delicado y variados, para todas las personas hombres mujeres y  niños. A falta de un local empecé a comercializar mis productos en línea creando mi propia Web y ofreciendo mis productos de forma personal entre amistades y conocidos.

 Desde la entrevista en el 2017 a la fecha ¿Puede contarnos un poco cómo le ha ido con su emprendimiento desde entonces?

En el 2017 realice mi primer desfile de moda artesanal bordada, en el Teatro Alejandro Cotto, esta fue una gran experiencia pues me lanzó de forma pública y permitió mostrar el bordado como parte activa de la moda actual; lastimosamente las autoridades municipales de la ciudad no mostraron ningún interés en promover este tipo de iniciativas, (como era el caso del añil) pero me dejo la certeza de que mis confecciones tiene potencialidad y mercado.

Desde aquel año he continuado trabajando y esforzándome por sostener este proyecto, entre separar las líneas de trabajo, los diseños, pedidos y todo lo demás que exige el mercado. Mantener un proyecto desde una comunidad no es cosa fácil, sin embargo, he procurado mantenerme a la altura y sin ningún apoyo de nadie, más que mi propio esfuerzo

¿Qué ha sido lo más difícil que ha tenido que enfrentar para mantener este negocio?

Lo más difícil y triste es darme cuenta que la cultura nuestra sigue viendo lo bordado como algo típico y campesino, por tanto no lo alcanzan a ver ni valorar como una prenda única, sino como una prenda típica simplemente y esa etiqueta le resta toda la posibilidad y esencia del bordado como parte activa de la moda actual, y entonces dejan de ver que quien la usa mantiene un concepto diferente pues luce un trabajo fino, delicado y autentico. Y así desvalorizan las confecciones en bordado artesanal y lo reducen a lo típico, sin darle otra oportunidad dentro de la moda.

En el 2019 llego la pandemia del Covid-19 ¿Puede decirnos cómo le afecto en su negocio?

Respecto a este tiempo con la pandemia y la lucha por un espacio en el mercado, fue como entender que todo esto era como un final no esperado. Han sido tiempos muy difíciles.  Los créditos dados se perdieron ya que al no ser pagados en su día me obligaron a cancelar pedidos y prolongar los plazos de cobro,  pues para nadie estuvo fácil con todo cerrado. Hasta esta fecha la mayoría de mis clientes han pagado por gotas, que honestamente, no permiten seguir con el proyecto. El Covid -19 nos desbarato todo.

¿Ha tenido alguna ayuda o apoyo de alguna institución para enfrentar la crisis?

No. No ha habido ningún apoyo. Es más en este punto CONAMYPE a cerrado más las puertas. Por ejemplo para dar asistencia a mi negocio me piden ventas de $5,000.00 dólares y créame que si vendiera eso creo que no les estuviera pidiendo ayuda.

CONAMYPE se dividió entre dos las grandes empresas y la micro. La micro la atiende CEDEMYPE y la orden es esa atender a clientes con ese potencial de venta, así que es como sacarnos al camino duro de seguir batallando solas. A mi CEDEMYPE me atiende porque yo estaba antes de la orden dada pero no pueden ayudarme mucho ya! Deben de cumplir órdenes de arriba.   

Hace unas semanas me di cuenta de unas capacitaciones de CEDEMYPE y me inscribí, pudiendo completar un nuevo diplomado en la Universidad Católica de Ilobasco,  financiado por la embajada de Estados Unido fui admitida y logré mi credencial el 22 de octubre

Muchos negocios debido a las consecuencias del Covid-19 se enfrentaron a la encrucijada de seguir o cerrar ¿puede contarnos cuál fue o es su situación con CandyKuilt?

Es muy difícil, pero al final el Covid-19 me llevó a cerrar la cuenta de contribuyente de la alcaldía y la del Ministerio de Hacienda y me he quedado esperando un milagro, para poder volver y continuar con mi empresa Candykuilt.

¿Qué necesita para seguir con su proyecto de negocio?

Para seguir necesito capital semilla que me deje respirar en medio de esta crisis, porque mi negocio se inició con mis ahorros  y así me he sostenido, pero así como está la situación ha sido duro, muy duro y sin financiamiento es cuesta arriba, casi imposible, sobre todo desde una comunidad, muy lejos del turismo del pueblo..

La crisis ha hecho que los emprendimientos deban inventar y diversificarse ¿Qué acciones ha hecho para mantener a flote su negocio CandyKuilt?

Esta crisis me llevo a pensar en cómo sacar provecho de lo poco que tengo y diversificar mis productos, esperando mejores tiempos. Así que empecé a pensar y crear productos que no necesitaran personal, ni bordadoras, ni modelos. Otras ideas que dieran luz y con el seminario que termine de AWE hoy estoy trabajando en la producción de hacer jabones y jaleas, como una forma de diversificarme y enfrentar los malos tiempos. Así que provechando el frutal que tengo en casa, decidí hacer jaleas de mango y pedí el apoyo de CEDEMYPE con el diseño de un logo. Así que hoy estoy ofreciendo jaleas bajo mi marca de CandyKuilt, si como jabones artesanales. Esperando que esto me ayude sobrevivir y que las cosas mejoren pronto y a ver si se cumple el milagro de volver y resurgir más fuerte con CandyKuilt.