En el 2020 las clases presenciales fueron suspendidas completamente en todo el país, producto de la pandemia por Covid-19. Como un hecho sin precedentes en la historia del municipio de Suchitoto, más de 5,000 estudiantes experimentaron la interrupción de las clases y se vieron obligados a recluirse en sus casas y experimentar una nueva forma de aprendizaje de manera virtual.
Para el 2021 las autoridades educativas dieron luces verdes al inicio de las clases presenciales, o semi presenciales, que pudieran permitir al estudiantado volver a las escuelas y compartir en un salón de clases siguiendo ciertos protocolos de bioseguridad para estudiantes y docentes.
Si el 2020 fue un año muy difícil, el 2021 no ha sido nada fácil. A pesar de llevar más de un año lidiando con la pandemia todavía resulta cansado para muchas personas mantener y cumplir las normas de bioseguridad. Pese a que hay miles de personas contagiadas y centenares de muertes, se observa en la población cierto relajamiento o indiferencia hacia los protocolos básicos de bio seguridad.
El año lectivo en Suchitoto inicio con mucha esperanza y optimismo. Sin embargo, con el trascurso de los meses los casos sospechosos de Covid 19 en los centros educativos empezaron a reportarse y a tratar de manejarlos de manera prudente, enviando a quienes reportaran ciertos síntomas a sus hogares, para que guardasen cuarentena y continuar sus estudios de manera virtual. Si bien es cierto el Ministerio de Educación ha creado procedimientos, estos siempre quedan a discreción de las autoridades del centro educativo, los padres de familia o la persona infectada, pues no siempre se dan cuenta del contagio (casos asintomáticos), y por otra parte, no existe el acceso inmediato a laboratorios para comprobar y hacerse un examen oportunamente.
Manejar la pandemia del coronavirus en los centros educativos no ha sido ninguna tarea fácil. Mientras muchos docentes se esfuerzan por continuar sus clases y enfocarse en el aprendizaje de sus estudiantes, deben también de vigilar que sus alumnos cumplan con las medidas básicas de bio seguridad, (sin contar con los recursos apropiados), una tarea que exige mucho esfuerzo de parte de los ya cansados docentes, que con mucha dedicación realizan sus labores.
Recientemente, en el casco urbano de Suchitoto, las autoridades departamentales de salud y educación han reportado varios casos oficiales de contagio en algunos centros educativos de la ciudad, teniendo que suspender las clases temporalmente, y continuar en la modalidad virtual.
Por otra parte, la pandemia ha hecho que las desigualdades que ya existían en el ámbito educativo y que nunca habían sido abordadas de manera adecuada, sean ahora más visibles y se agudicen. Como suele suceder, la crisis ha golpeado doblemente y con más fuerza a los educandos y estudiantes más vulnerables y marginados.
Por su parte, debido al aumento de casos en el municipio, la Comisión Municipal de Protección Civil ha tomado la decisión de fortalecer los protocolos de bioseguridad en la ciudad y comunidades, en un nuevo intento por generar conciencia entre la población sobre la importancia de seguir cumpliendo las únicas armas que hasta hoy existen: la prevención como una manera de contener y disminuir los contagios.
A unas semanas de concluir el año lectivo, reconocemos el enorme esfuerzo del personal docente por continuar las clases a pesar de las adversidades y falta de recursos apropiados para enfrentar la pandemia del Covid 19. Asi mismo animamos a las madres y padres de familia a colaborar todas y todos en la contención de los contagios al estar vigilantes de que sus hijos e hijas cumplan con las medidas de bioseguridad.