En Suchitoto las elecciones y sus resultados han dejado una evidente fisura en el tejido social de las relaciones en comunidad. Al parecer muchos siguen en la lógica de señalamientos peyorativos entre sí como respuesta de frustración o prepotencia. Por una pérdida o un triunfo que corresponde a un partido y no al pueblo, porque al final lo que se escoge es un alcalde y un grupo de personas que deben de servir al pueblo. 

Lo cierto es que el municipio debe de superar esta etapa de los insultos, reclamos, descréditos y culpas como forma de argumentar y construir ciudadanía. Tanta lascivia y odio lanzado en las redes sociales y otros espacios no beneficia al municipio, sino que, por el contrario, beneficia a quienes quieren distraerle de los verdaderos temas centrales que están en juego en el municipio.

Una de las cosas más urgentes es reparar el tejido social de la ciudad y superar el enfrentamiento, eso lo lograremos en buena parte si, los líderes y lideresas del municipio son capaces de transmitir mensajes a las comunidades para fortalecer y unir la organización social, el verdadero sentido de comunidad del municipio e identificar al verdadero enemigo de la comunidad: la división y/o desunión.

Una primera cosa a tener presente es que los gobiernos municipales no pertenecen a ningún partido político; si bien estos siempre se creen los dueños es importante comprender que el Concejo Municipal, en el cual está integrado el alcalde o alcaldesa, simplemente pasan a ser empleados públicos y servidores del pueblo. En la medida que comprendamos esto, entenderemos que el Concejo no tiene el poder absoluto, que el poder siempre ha estado en la población activa.

Esto nos lleva a la segunda cosa importante, es el papel que juega y debe de jugar usted y yo como ciudadana y ciudadano en el municipio. Por años, el gobierno municipal ha marcado el rumbo, pero ¿Qué tal si frente a esta nueva coyuntura política ejercemos mayor participación en nuestro derecho ciudadano y protagonizamos un papel más activo desde nuestras comunidades y colectivos?

Pero ¿cómo podemos ejercer una participación más activa en el futuro gobierno municipal? Para poder jugar un papel determinante, es necesario que, en nuestras comunidades, logremos estar organizadamente unidos y tener claridad sobre qué problemas nos afectan. Y nadie sabe mejor cuáles son esos problemas que los propios miembros de la comunidad; esto ya de por sí, no puede ser definido unilateralmente por un gobierno de turno. Entonces un buen paso en el ejercicio y empoderamiento de las comunidades frente al gobierno local, es tener claridad de los problemas y necesidades, además de tener muy claro que nunca serán resueltas a cabalidad por ningún gobierno. Lo que significa que como comunidad tenemos que aprender a priorizar y negociar internamente, para luego pasar a proponer y gestionar con el gobierno, este es el camino de la gobernanza. Esto significa que si en nuestras comunidades perdemos la unidad y capacidad de dialogo y acuerdos consensuados difícilmente lograremos consensuar e influir en los proyectos y las decisiones del gobierno.

En este marco las organizaciones, ADESCOS y colectivos de las comunidades son claves en la generación y consolidación de demandas y peticiones puntuales. Es muy importante que abramos los ojos y rompamos el divisionismo que los partidos nos quieren imponer como forma de manipulación o distracción mediática.

Es tiempo de que superemos la fase de la lucha partidaria, para la población esta termino con las elecciones, dejemos ese pleito a los partidos quienes tendrán que hacer sus análisis, transformaciones y cambios para recuperar o mantener la simpatía del pueblo. Por hoy es momento de pasar la página de la contienda electoral y enfocarnos en asumir nuestro papel en la corresponsabilidad entre ciudadanos y tener un rol más decisivo en el rumbo del municipio y en la gestión municipal para avanzar hacia un gobierno con una participación ciudadana activa. Y este derecho no es negociable por ninguna elección. Las comunidades y organizaciones sociales pueden ser muy oportunas al participar activamente, cooperando e incidiendo en la construcción de las prioridades municipales de cara a la búsqueda del desarrollo equitativo y sustentable en el municipio.

Todos y todas sabemos, que cuando las organizaciones sociales se activan y actúan unidas involucrándose en las decisiones comunales, se tiende a superar la burocracia, los obstáculos, lograr consensos, mayor contraloría, transparencia, y un sentido de unidad y lucha avanzando todos y todas juntas. Por supuesto, lograr esto requiere de persistencia, resistencia, dialogo y lucha constante y tenaz, pero sobre todo de compromiso y voluntad por el bienestar de Suchitoto 

Este es el camino. Sigamos fortaleciendo las comunidades y construyamos puentes de comunicación, espacios de dialogo para lograr entendimientos y presentar propuestas consensuadas de los diferentes sectores del municipio con el Concejo Municipal de turno. Pensemos en el ahora y el futuro de Suchitoto.

Mejorar la gobernanza local con participación ciudadana es una herramienta vital para garantizar la paz y armonía, impulsar el desarrollo económico, aumentar al máximo la eficiencia administrativa y garantizar la inclusión social y la sostenibilidad ambiental.

El periódico digital Gaceta Suchitoto, es un espacio para el dialogo y la opinión ciudadana. Un foro abierto al debate y la crítica constructiva. Nuestro trabajo periodístico de 4 años defendiendo nuestros ideales son la mejor prueba de nuestro compromiso, independencia y profesionalismo del ejercicio periodístico en la comunidad.

Ante la confusión que quieren sembrar algunas personas mal intencionadas, es importante aclarar, que el periódico a lo largo de 4 años ha demostrado profesionalismo al ser un medio independiente, imparcial y objetivo en la búsqueda de la construcción de ciudadanía participativa. Nuestro joven equipo tiene un compromiso con generar un periodismo comunitario y participativo donde todas las voces tienen un espacio.

En ese sentido le invitamos a participar y debatir con ideas, no con insultos, descréditos o calumnias perniciosas. Aprendamos a construir y edificar con nuestros comentarios y opiniones, manteniendo el respeto a la dignidad e integridad de las personas y la libertad de opinión.