El encanto de Suchitoto, no solo radica en sus calles empedradas y su arquitectura histórica, sino también en sus artistas y su vibrante producción artística. Sin embargo, en el corazón de esta escena cultural, se teje una dinámica interesante que nos hace cosquillas entre la forma que vemos, valoramos y tratamos a los artistas locales que merece ser explorada.

Desde hace años vemos como en los parques de Suchitoto, el arte florece en su forma más auténtica y espontánea. Aquí, los artistas locales encuentran su lienzo al aire libre, donde pueden compartir su creatividad con los visitantes que deambulan por las plazas. Los músicos, cantantes, pintores, artesanos y actores locales dan vida a los espacios públicos, convirtiendo los parques en escenarios de expresión cultural que reflejan la identidad y las tradiciones de la comunidad.

Sin embargo, la escena artística de Suchitoto, rica en muchos talentos, creatividad y eventos artísticos, enfrenta un dilema que merece ser analizado y abordado críticamente, se trata de la disparidad en las oportunidades ofrecidas a los artistas locales versus los artistas foráneos que nos visitan.

Si bien nuestra ciudad es conocida por su vibrante vida cultural, una mirada más cercana y acuciosa revela cierta distribución desigual en los espacios, participación, retribución y recursos, con los artistas locales quienes en muchos casos deben resignarse a exponer o actuar en parques y plazas, o pagar por el uso de espacios, mientras que los foráneos se presentan y son atendidos en los centros culturales existentes.

Es así como encontramos en los pintorescos parques de Suchitoto, a los artistas locales quienes a menudo, es aquí donde encuentran su único lugar para exhibir sus obras y talentos. Esto aplica a pintores, escultores, artesanos, teatristas, bailarines, músicos, cantantes etc., quienes realizan sus actividades artísticas en espacios, que, si bien tienen un encanto innegable y especial, de conexión directa con el público, a menudo carecen de las instalaciones y condiciones adecuadas para la exhibición de arte de calidad y para la apreciación adecuada de la audiencia.

En contraste, el hermoso centro cultural del municipio mantiene una terrible ausencia programática de actividades y por otra parte los pocos centros culturales de Suchitoto, con su arquitectura y recursos adecuados, son reservados principalmente para artistas foráneos que participan en actividades puntuales y de vez en cuando alguna participación local. Hay que reconocer que, gracias al compromiso de estas organizaciones culturales, a menudo podemos acceder a hermosas presentaciones artísticas -en su mayoría de veces de manera gratuita-, presentando exposiciones y espectáculos de gran calidad con un enfoque en artistas de renombre nacional e internacional. Sin lugar a dudas que estas actividades y diversidad cultural son muy enriquecedoras, pero no se puede pasar por alto la falta de igualdad de oportunidades para los artistas locales que se esfuerzan por mejorar su calidad y tener acceso también a estos espacios de su ciudad natal.

La brecha entre las oportunidades disponibles para artistas locales y foráneos plantea algunas interrogantes sobre la equidad y la inclusión en la escena artística de Suchitoto. ¿Por qué los artistas locales no tienen un lugar más prominente en los centros culturales de la ciudad? ¿Por qué los recursos y el apoyo financiero de la municipalidad no se destinan de manera más equitativa para apoyar a nuestros artistas locales? ¿Cómo pueden estos espacios promover una mayor integración entre los talentos locales y foráneos?

Si bien es cierto comprendemos la dinámica del medio artístico de, demostrar el talento, persistencia y perseverancia, sudando la camiseta y ganándose de a poco el derecho a los espacios, es necesario otorgar oportunidades para nuestros artistas, estimulándoles en espacios concursables donde ellos puedan competir y mostrar sus habilidades artísticas libres de prejuicios y discriminaciones, así como en paridad de condiciones.

Promover la inclusión y el acceso igualitario en la escena artística es fundamental para el crecimiento y la prosperidad de una comunidad cultural. Contamos con algunos semilleros con talleres de arte y artistas empíricos que necesitan mostrar su talento, son artistas locales, guardianes creativos de la autenticidad y la identidad cultural de Suchitoto y, por lo tanto, debemos apoyar significativamente para hacer florecer y compartir su creatividad dándoles su lugar y valor en los escenarios adecuados que tiene la ciudad.

Es necesario que las autoridades municipales, las instituciones y espacios culturales de Suchitoto, reevalúen su enfoque en la distribución de recursos y oportunidades artísticas. La inclusión de artistas locales en los centros culturales de la ciudad no solo enriquecería la oferta cultural para todos y todas, sino que también promovería la diversidad, la inclusión y la autenticidad que caracterizan a Suchitoto como un epicentro cultural en El Salvador. Este llamado también aplica al público, que, si bien dicen que nadie es profeta en su tierra, es necesario mostrar que en Suchitoto si apreciamos a nuestros artistas locales.

En última instancia, es importante decir y aclarar, que esta diversidad artística en Suchitoto -que fusiona artistas locales, nacionales e internacionales- es un activo valioso que contribuye a la vitalidad de la ciudad. Los parques y los centros culturales desempeñan roles complementarios en la promoción del arte, y la coexistencia de artistas locales y foráneos es una manifestación de la apertura y la riqueza cultural que caracterizan a esta hermosa ciudad. La conversación en curso sobre cómo equilibrar estas dinámicas es para seguir enriqueciendo el panorama artístico de Suchitoto y, con suerte, permitir que florezcan nuevas formas de colaboración, participación y apoyo a nuestros artistas locales en Suchitoto.