Suchitoto sostenible: reflexión sobre el liderazgo de las mujeres

¿Cuál es la clave del éxito del desarrollo sostenible en Suchitoto? Son las mujeres. El trabajo de las mujeres en Suchitoto, y en América Latina en general, es fundamental para el crecimiento económico, la estabilidad política y la transformación social.

Por Amanda Knowles

Muchos aspectos de Suchitoto lo convierten en un lugar especial. Uno de los más sorprendentes es su progreso y potencial en materia de desarrollo sostenible. El desarrollo sostenible es fundamental en nuestra época actual ante el cambio climático, la globalización y la gran desigualdad. En 2015, todos los Estados miembros de las Naciones Unidas adoptaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. Esta agenda estableció un conjunto de 17 objetivos en las áreas social, ambiental y económica para que los gobiernos, las organizaciones y los individuos se esforzaran por crear un mundo mejor para todas las personas y futuras generaciones.

               Suchitoto, por su sólida sociedad civil y sus proyectos medioambientales y sociales, constituye un excelente ejemplo para el análisis del desarrollo sostenible en una región que históricamente ha tenido dificultades para progresar. La geografía, la colonización y la corrupción son sólo algunos de los obstáculos a los que se ha enfrentado América Latina en su camino hacia el desarrollo. ¿Cuál es la clave del éxito del desarrollo sostenible en Suchitoto? Son las mujeres. El trabajo de las mujeres en Suchitoto, y en América Latina en general, es fundamental para el crecimiento económico, la estabilidad política y la transformación social.

               La igualdad de género es uno de los objetivos de desarrollo sostenible creados por las Naciones Unidas, pero ha sido una cuesta arriba en una región en la que las actitudes culturales hacia las mujeres fueron parcialmente formadas por el catolicismo ibérico, importado durante la colonización. Los altos índices de feminicidios, agresiones sexuales y desapariciones contra las mujeres siguen siendo frecuentes en muchas partes de América Latina. Según el Foro Económico Mundial, El Salvador ha reducido su brecha de género en 3,2 puntos porcentuales este año, ascendiendo al puesto 43 a nivel mundial. Parte de este progreso se debe a la integración de las mujeres entre los altos cargos (44,3%) y los ministros (43,8%). Sin embargo, las desigualdades siguen existiendo. Las mujeres de Suchitoto, como las de la Colectiva Feminista para el Desarrollo Local, están trabajando para cambiar esto.

               Caminando por nuestras hermosas calles de estilo colonial español, uno no puede dejar de notar los sellos en casas y negocios que dicen «En esta casa queremos una vida libre de violencia para las mujeres» Este es uno de los muchos proyectos que Colectiva Feminista ha emprendido en Suchitoto. Desde 2014, han estado promoviendo el derecho humano al agua con organizaciones locales como la Concertación de Mujeres de Suchitoto, junto con las municipalidades. Siguen protegiendo nuestra agua de la sobreexplotación y la contaminación por parte de la agroindustria. Esta labor es esencial en un país donde gran parte de las aguas subterráneas están contaminadas.

                Los miembros de la comunidad, de todos los ámbitos, también trabajan por un futuro más sostenible. Las y los jóvenes han organizado grupos para limpiar los ríos. La alcaldía ha ofrecido talleres de mecánica, cosmetología e inglés. En la ciudad vemos más paneles de energía solar, contenedores de reciclaje y cajas de préstamo de libros. Nuestra basura orgánica tiene una segunda vida como fertilizante. La Plataforma Global ha trabajado para crear capacidad y conciencia cívica en los jóvenes locales. El Centro de Arte para La Paz orquesta diversos programas para fortalecer el tejido social de nuestra comunidad en la posguerra. En estas organizaciones y asociaciones reside la fuerza y el potencial que tenemos para afrontar nuestros problemas de desarrollo actuales y futuros.

               Suchitoto está en camino de ser el líder en el desarrollo sostenible de El Salvador gracias a sus mujeres y a las asociaciones que han formado dentro de las comunidades. Para seguir abordando los problemas de la pobreza, el cambio climático, la desigualdad de género, la buena gobernanza y otros objetivos de desarrollo sostenible, es fundamental crear y fortalecer estas asociaciones. Las mujeres del gobierno, de los sectores agrícola y empresarial, de las organizaciones sociales y religiosas y de otros miembros de la comunidad deberían formar un comité de desarrollo sostenible para seguir encontrando puntos en común para alcanzar los objetivos de desarrollo de la ONU.

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Sustainable Suchitoto: Analysis about women’s leadership

               Many aspects of Suchitoto make it a special place. One of the more surprising reasons is its progress and potential in sustainable development. Sustainable development is critical in our current era in the face of climate change, globalization, and gross inequality. In 2015, all United Nations Member States adopted the 2030 Agenda for Sustainable Development. This agenda laid out a set of 17 goals in the social, environmental, and economic areas for governments, organizations, and individuals to strive towards in order to create a better world for ourselves and our children.

               Suchitoto, due to its robust civil society and environmental and social projects, provides an excellent example for analysis of sustainable development in a region which has historically faced difficulties in progress. Geography, colonization, and corruption are just a few obstacles Latin America has faced on its road to development. What is the key to successful sustainable development in Suchitoto? It’s women. The work of women in Suchitoto, and Latin America in general, is critical to economic growth, political stability and social transformation.

               Gender equality is one of the sustainable development goals created by the United Nations. Gender equality has been an uphill climb in a region where cultural attitudes towards women were partially formed by Iberian Catholicism, which was imported during colonization. High rates of femicide, sexual assault, disappearances against women are still rife across many parts of Latin America. According to the World Economic Forum, El Salvador has reduced its gender gap by 3.2 percentage points this year, climbing to 43rd globally. Part of this progress is due to integrating women among senior officials (44.3%) and ministers (43.8%). However, inequalities still exist. Women in Suchitoto, such as those at Colectiva Feminista para Desarrollo Local, are working to change that.

               Walking down our beautiful Spanish colonial style streets, one can’t help but notice the stamps on houses and businesses that says “En esta casa queremos una vida libre de violencia para las mujeres” This is one of the many projects Colectiva Feminista has undertaken in Suchitoto. Since 2014, they have been to promote the human right to water with la Concertacion de Mujeres and the mayor’s office. They continue to protect our water from overuse and pollution by agribusiness. This work is essential in a country where much of the groundwater is contaminated.

                Community members from all walks of life are also working towards a more sustainable future. Young people have organized groups to clean up the rivers. The mayor’s office has offered mechanic, cosmetology, and English workshops. Around town we are seeing more solar energy panels, recycling receptacles, and book lending boxes. Our organic garbage is given a second life as fertilizer. The Global Platform has worked to build capacity and civic mindedness in local youth. El Centro de Arte para La Paz orchestrates a variety of programs to strengthen the social fabric of our community in the post war period. In these organizations and partnerships lies the strength and potential we have to face our current and future development issues.

               Suchitoto is on its way to being the sustainable development leader of El Salvador thanks to its women and the partnerships they have formed within the community. In order to continue to address issues of poverty, climate change, gender inequality, good governance and other sustainable development goals, it is critical to build and strengthen these partnerships. Women from the government, agricultural and business sectors, social and religious organizations and other community members should form a sustainable development committee to continue to find commonality in reaching the UN’s development goals.

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