En el barrio Concepción a una cuadra del parque emblemático del amate se encuentra un emprendimiento que una pareja de jóvenes ha llamado “El Buen Gusto” ellos son Vladimir Cedillos y María José Marroquín. Originarios de San Salvador pero enamorados de Suchitoto, desde hace más de un año emprendieron la aventura de abrir este negocio en la ciudad de pájaros y flores.
Vladimir y María José comentan que “El Buen Gusto» surge de la necesidad de construir un negocio propio que les permitiera superarse, y al cual le han puesto mucho corazón, esfuerzo, dedicación y trabajo arduo para salir adelante cada día. Esta pareja ven esta iniciativa como una oportunidad de crecimiento tanto personal como económico. Personal ya que toman responsabilidades sacando adelante el proyecto trazado y estando consientes que en ese camino se encontrarán con pruebas difíciles, pero no obstante con la constancia y dedicación se superarán Y en lo económico como una oportunidad de desarrollo para sus familias teniendo una mejor calidad fruto de ese esfuerzo.
El Buen Gusto se apertura hace un año y 6 meses bajo un ambiente familiar y con el concepto de comida rápida, donde puede disfrutar desde el más pequeño hasta adultos mayores. El menú incluye una la variedad de opciones en platillos que ofrecen donde las tortas cubanas, las pizzas y las infaltables pupusas tradicionales son los más buscadas por su clientela.
La actividad de trabajo de estos jóvenes comienza a partir de las 8:00 am cuando dan inicio a la producción y elaboración de materia prima para cada uno de sus platillos y de 10:00 am a 9:00 pm servicio en mesa para sus comensales.
Al igual que la mayoría de negocios locales El Buen Gusto se vio afectado por la pandemia del COVID-19 obligando a los propietarios a cerrar completamente por varios meses. Ante esta situación tuvieron que buscar una estrategia para seguir y han estado ofreciendo durante estos meses el servicio a domicilio de sus platillos, servicio que aún brindan para las personas que no tiene la confianza aun de salir por el tema de contagio del virus pero que quieren degustar de su menú.
Como en todo emprendimiento para estos jóvenes, la aventura ha sido de ganar mucha experiencia y de enfrentar con ánimos los malos tiempos, tomando sus riesgos. Comentan que continuar en el contexto de la pandemia ha sido muy difícil, pues han tenido desde un día muy exitoso con las ventas a días donde se han ido a cero. Consientes de las circusntancias saben que con esfuerzo y perseverancia poco a poco verán los frutos en su proyecto. Reconocen que el contexto que vivimos es un proceso paulatino y que seguirán luchando con esfuerzo y dedicación porque las metas de su emprendimiento sean cumplidas
Aseguran que desde la apertura del negocio han tenido muy buena aceptación creando en este plazo clientes fijos, de quienes han recibido muy buenos y positivos comentarios que los motivan a seguir de pie con su proyecto de negocio.
Actualmente han realizado mejoras y adecuaciones al negocio para ofrecer un mejor servicio y ambiente a sus clientes donde puedan comer rico bajo un ambiente cálido familiar, adoptando para este tiempo los protocolos de bioseguridad exigidos con la aplicación de alcohol gel a la entrada del establecimiento, distanciamiento y limpieza de mesas, para comodidad y seguridad de quienes los visitan.
El mayor objetivo y meta a alcanzar de estos jóvenes emprendedores es expandir “El Buen Gusto” y contar con más de un establecimiento y así poder crear fuentes de empleo siendo productivos para el desarrollo del municipio.
«Para nosotros El Buen Gusto es llegar a cada uno de nuestros clientes y establecer una conexión única con ellos, con nuestro variado menú, complaciendo hasta los más exigentes gustos, con nuestro toque especial” Vladimir y María José, emprendedores y propietarios de El Buen Gusto.
Su cuenta de Instagram es “El buen gusto Sv” donde puedes ver opciones de comida rápida que ofrecen, promociones y ubicación para que puedas llegar con familia, amigos, pareja o con quien tu desees y pasar una experiencia agradable en este emprendimiento local donde con mucho gusto te atenderán para que quedes invitado o invitada a regresar.
Por Julissa Padilla
