Dando seguimiento a la campaña #SalvemosElLagoSuchitlán, hoy ampliaremos la información sobre uno de los síntomas más evidentes del alto grado de contaminación que sufre el lago Suchitlán (Embalse Cerrón Grande). Nos referimos a la ninfa, lechuga, jacinto de agua o Eichhornia crassipes.

Cada año, todos somos testigos de esta enorme alfombra verde que se expande cada vez sobre una gran extensión de la superficie del lago, y cada vez la alfombra verde cubre más y más superficie del lago. Por muchos años el problema se ha resuelto simplemente removiendo y sacando la mayor cantidad de vegetación para que continúe la navegación de lanchas y la pesca en el lago. Y muy pocas veces, se ha hablado sobre las causas y lo que este enorme nacimiento de ninfa significa.

El fenómeno de la proliferación de la ninfa se llama Eutrofización

La eutrofización es el enriquecimiento de nutrientes que ocurre en los ecosistemas acuáticos. Básicamente podríamos decir que es un proceso natural, que comienza cuando el agua recibe un vertido de nutrientes, como desechos agrícolas, químicos o humanos (excremento), lo cual hace que favorezca el crecimiento excesivo de materia orgánica, provocando un crecimiento acelerado de algas y otras plantas verdes como es el caso de la ninfa que cubren la superficie del agua y evita que la luz solar llegue a las capas inferiores.

En ecología el término eutrofización designa el enriquecimiento excesivo en nutrientes de un ecosistema acuático. El uso más extendido se refiere específicamente al aporte más o menos masivo de nutrientes inorgánicos que contienen N y P en un ecosistema acuático con la entrada de agua restringida, como por ejemplo en un lago. Eutrofizado es aquel ecosistema o ambiente caracterizado por una abundancia anormalmente alta de nutrientes (procedentes normalmente de actividades humanas), de forma que se produce una proliferación descontrolada de algas fitoplanctónicas. En general, en las aguas dulces comienza con un crecimiento de diatomeas y clorofíceas, para acabar con las cianofíceas (o cianobacterias) en su última fase, consumiendo hasta agotar todo el N (nitrógeno) y P (fósforo), hasta que este elemento actúa como limitante de la producción primaria. Estas cianobacterias forman una capa en superficie, que impide el paso de la luz solar y la fotosíntesis por debajo de ellas, por lo que la producción primaria no puede existir a mayores profundidades. (Wikipedia)

Por tanto, la proliferación del jacinto de agua en el lago Suchitlán está impidiendo que la luz penetre hasta el fondo del ecosistema, y en consecuencia, la vegetación bajo el agua morirá al no poder realizar la fotosíntesis, generando que otros microorganismos, como bacterias, se alimenten de la materia muerta, consumiendo el oxígeno que necesitan los peces y moluscos, y a la vez todo esto genera algas tóxicas y microorganismos patógenos que podrían causar enfermedades.

Causas de la eutrofización

Las principales causas de la eutrofización son las siguientes:

• La contaminación urbana mediante residuos orgánicos e inorgánicos, como el fosfato.
• La contaminación humana por actividades agropecuarias, industriales o descargas de excrementos.
• La contaminación proveniente de basura y residuos químicos en los ríos afluentes.
• La contaminación atmosférica por óxidos de azufre y nitrógeno que reaccionan con el agua atmosférica para formar ion sulfato e ion nitrato.

Si bien es cierto que las causas pueden ser diversas, nadie puede negar que dos de las principales causas son las enormes descargas de aguas grises (excrementos) provenientes de la capital, a través del río Acelhuate, y la enrome cantidad de residuos agro químicos provenientes de más de 140 empresas industriales que vierten impunemente sus residuos, aguas y desechos en los ríos Sucio y Acelhuate.

El Índice de Calidad de Agua (ICA), de tres de los principales ríos que vierten al embalse (Acelhuate, Sucio y Suquiapa), varía según los puntos entre malo y pésimo. Este humedal recibe del río Acelhuate una descarga mensual de más de 8.5 millones de libras de excretas, procedentes de 18 sistemas de aguas negras que drenan más de 1.5 millones de hogares del Área Metropolitana de San Salvador (AMSS). Los ríos Suquiapa, Sucio y Acelhuate, que juntos representan el 30 % del caudal que entra al humedal Cerrón Grande trasladan descargas contaminantes de 157 fuentes, 54 industrias, 55 beneficios de café, siete ingenios azucareros, 29 redes de alcantarillas y nueve rastros municipales. El Acelhuate recibe descargas de 17 industrias de metal y afines, 22 textilerías, siete fábricas de pintura y 11 plantas papeleras. De un total de 145 industrias, solo nueve tratan sus desechos. ( Inventario Nacional de Humedales 2017)

Por lo tanto, la proliferación de tan grande cantidad de ninfa sobre las aguas del lago, solo son el síntoma de la enfermedad, porque el problema va más allá de la ninfa; el problema real que se tiene que resolver de forma urgente e impostergable son las causas que hacen que la naturaleza reaccione así, es decir la raíz del problema mayor es la contaminación, no la ninfa.

Así que habrá que agradecer al Ministerio del Medio Ambiente MARN sus esfuerzos por retirar la ninfa frente a las riberas de Suchitoto. Pero habrá que exigir al MARN y CEL acciones urgentes para detener la contaminación que poco a poco convierten el embalse en una enorme cloaca. Y aquí es donde entran las municipalidades y la participación ciudadana. Si nadie dice nada, nunca pasa nada y heredamos el problema a las generaciones siguientes. #SalvemosElLagoSuchitlán

Fotografías: MARN. Infografías tomadas de Internet