!Reforma a las pensiones! y !Mejores condiciones labores! fueron las consignas que resonaron desde tempranas horas hoy en las principales calles del histórico municipio de San Salvador, abarrotado por cientos de trabajadores, estudiantes y sindicalistas que pedían mejores condiciones de vida y el respeto de los derechos laborales y sindicales en la conmemoración de la lucha de los Mártires de Chicago de 1886, en el Día Internacional del Trabajo.
La marcha inició a las 9:00 de la mañana, desde diferentes puntos de la capital como la Plaza Minerva de la Universidad de El Salvador (UES), en los alrededores de un centro comercial capitalino, Redondel del Árbol de Paz y Redondel Shafick Handal hasta concentrarse unos en la plaza Gerardo Barrios y otros en la plaza del Divino Salvador del Mundo. Durante el recorrido los manifestantes alzaban su voz para exigir respeto a los derechos laborales, mientras que otros lo hacían manchando paredes de propiedad privada con frases como: !No más obreros muertos! y “Rojos y tricolores los mismo explotadores”
Entre otras peticiones, los sindicatos exigieron el aumento justo al salario mínimo que permita a las familias más pobres vivir dignamente, específicamente por las personas de maquilas que trabajan por largas jornadas con un sueldo mal remunerado. Aunque reconocieron que el aumento de 300 dólares es uno de los mayores logros, consideran que es insuficiente para la canasta básica, ya que no se logra cubrir las necesidades de una familia.
Por otra parte, los sectores campesinos y trabajadoras sexuales se sumaron a la marcha y aplaudieron los programas implementados por el gobierno en turno, pero manifestaron que aún falta más por hacer, tal es el caso, la coordinadora del sindicato Mujeres flor de Piedra Zulma Alvarado quien exigió que el trabajo sexual sea reconocido como tal.
Sin embargo, otros sindicatos como veteranos de guerra se manifestaron contra el gobierno alegando que este gobierno es el que más ha golpeado a la clase obrera con sus malas políticas, el costo de la vida, la inseguridad y la falta de medicina en los hospitales.
A medida que la marcha se desarrollaba, más sectores de la sociedad se sumaban como la Universidad de El Salvador quienes cada año se hacen presente para exigir una educación de calidad y gratuita para todos los salvadoreños. En esta ocasión acompañados de personajes mitológicos que le pusieron color a este acto en conjunto con asociaciones del gremio estudiantil.
Y aunque la marcha se trataba de protestar porque se respeten los derechos de los trabajadores, para otros esas peticiones desaparecieron desde hace tiempo, pues para ellos no hay ningún día de asueto o descanso, ya que los día festivos es donde más ganancias obtienen, ya sea vendiendo con los espectadores o con los marchistas, este es el caso de los comerciantes informales en el que se encuentran mujeres, hombres y en gran mayoría niños.
“No marcho porque la verdad es que hay que venir a trabajar y en el comercio es un buen día para vender” expresó Sonia Rivera entre sudor y cansancio una comerciante informal quien trabaja por sus tres hijos, y quien además pidió al gobierno que aumente la seguridad en las calles, ya que en muchas ocasiones son víctimas de asaltos, de renta o incluso de acoso sexual y que los derechos sea más equitativos en los cuales se incluyan a los comerciantes informales.
Esta conmemoración se celebra cada primero de mayo en muchos países, en honor a los Mártires de Chicago, un grupo de sindicalistas anarquistas que fueron ejecutados en 1886 por luchar para las jornadas laborales se redujeron a ocho horas.
Al finalizar la marcha, unos se concentraron en la Plaza Gerardo Barrios donde desarrollaron un acto protocolario dirigido por dirigentes de partidos políticos, activistas, grupos musicales y las diferentes asociaciones, gremios y estudiantes que se concentraron en dicha zona.
Oscar Orellana estudiante de Periodismo, Licenciatura en Comunicación Social, Universidad de El Salvador UES.