En esta ocasión decidí escribir sobre mi viaje a un pueblo que aún conserva sus calles empedradas, los pobladores toman el término rustico como propio, pues incluso las autoridades tienen establecido para las construcciones y negocios estándares de paleta de colores, utilización de publicidad sobre madera y otros que te transportan al pasado.

Si, anduve paseando por Suchitoto, un pequeño municipio de El Salvador, recomendado para aquellos que aman el arte en sus diversas expresiones, éste destino se encuentra integrado por miradores, hoteles, hostales, restaurantes, el lago más grande de El Salvador (artificial), gastronomía, religión, música, teatro, manualidades, entre tantas cosas.

Mi consejo, dirigido para aquellos que les apasiona conocer lugares hermosos es, reservar en su itinerario dos o tres días para este municipio, pues existen diversidad de actividades y opciones por conocer en tan pequeño lugar.

En esta localidad existen unos cuantos museos, que muestran la historia local, colonial e incluso prehispánica, estas pequeñas edificaciones son santuarios con diferente temáticas entre ellas: la moneda, los platos, el añil (solo de este se puede realizar un mega post).

Si el añil es laboriosamente utilizado en el destino en cuestión, se puede dedicar un día completo a conocer la historia, procesamiento artesanal e ingeniosos usos colorantes en manta o telas, que actualmente se exportan hacia Europa.

En la nación completa se promueve lo que es la diversidad de culto, donde cada quien puede elegir que religión o credo seguir, incluso el ateísmo es propuesto desde una corriente humanitaria. En Suchitoto la inmensa mayoría son católicos, y su templo además de ser patrimonio se conserva con celoso detalle por las autoridades.

El techo, las paredes, el piso, lámparas, asientos, las columnas revestidas de madera, cada detalle de color es guardado como un depósito de fe y cultura en el templo ubicado frente al parque central.

Si bien cada negocio debe cumplir con rígidos estándares de color, diseño e infraestructura, esto solamente es orientado a guardar el tema colonial del municipio, pues el ingenio y creatividad de los locales no se limita, con admiración pude notar propuestas interesantes, que rescatan la cultura y son apreciadas por turistas, ejemplo de ello es el Café Literario Eluney.

En este bello y acogedor lugar se vive la relajante sensación de tomar un fino café, acompañarlo con un libro de autores locales o extranjeros, de géneros desde ciencia ficción, romanticismo, sátira, entre otros.

Además existen rincones reservados donde el visitante puede conocer productos artesanales elaborados a nivel nacional, estos son certificados y aprobados para ser promovidos con gran diligencia.

La municipalidad promueve diversas actividades enfocadas a un país, lengua, cultura o arte específico, ejemplo de ello fue el pasado mes de marzo enfocado a conocer la cultura de la nación Francesa, donde la música, teatro, cine y literatura se enfocó en conocer las peculiaridades de tan célebre país.

Existen cascadas, y lugares de flora diversa por conocer en este sitio, además del lago de Suchitlan, donde se puede pasear en lancha, conocer la historia, biodiversidad y peculiaridades de la naturaleza.

En este ecosistema además de apreciar la belleza de las aves, también se pueden observar las bondades y astucias de las especies, a tal grado que los pelícanos y garzas ambos de color blanco, esperan como listos centinelas, la pesca efectiva del conocido localmente pato puerco (pato de color negro), debido que los primeros no pueden sumergirse en el lago a capturar su alimento, esperan sigilosamente el momento en que los patos atrapen los peces y entonces se abalanzan sobre ellos con el fin de robarles la presa obtenida.

Además de la naturaleza que envuelve a este lago, se le suman las diversas leyendas, anécdotas e incluso historia: existen islas con nombres singulares como la isla del burro, en determinado sector se puede visualizar el templo que yace sumergido bajo las capas de agua, la isla del ermitaño y también la historia del accidente de una avioneta.

Si este trágico acontecimiento es conocido por todos los pobladores, en el siglo pasado, específicamente en la década de los ochentas, El Salvador sufría una violenta e incansable guerra civil, por entonces una avioneta sobrevolaba en las cercanías del lago con dificultades mecánicas, informaron por radio que no había vuelta atrás, el pájaro metálico no respondía correctamente a las órdenes del piloto, se agotó el combustible, entonces el piloto eligió descender sobre el lago, lo cual no pudo realizar y se estrelló junto a sus dos acompañantes.

Según los informes el piloto sobrevivió y fue auxiliado por un pescador, estuvo en coma mucho tiempo pero se recuperó, los otros dos compañeros murieron en el instante del impacto.

La avioneta fue solicitada por las autoridades locales a la división de aviación, posterior al permiso los pescadores la retiraron del agua y la colocaron sobre una isla en medio del lago.

Texto y fotografías por Josecito.

Josecito. Ingeniero de Sistemas, Lector, Escritor, Cinéfilo, Autodidacta y Curioso.