Desde su fundación y durante los ultimos años acompañamos todo el proceso de creación y consolidación del Museo la Memoria Vive en Suchitoto, surgido en el seno del Centro Arte para la Paz. En el recuerdo están presentes decenas de jóvenes, muchos nombres y rostros, llenos de optimismo, energía y entusiasmo por emprender la defensa y rescate de la memoria en el municipio.
En el trayecto compartimos numerosas experiencias y aprendimos a construir procesos colectivos fincados en la búsqueda de las voces y testimonios que nos permitieran dibujar la memoria histórica de Suchitoto, lejos de los academicismos pero cercana a los recuerdos y vivencias del pueblo.
El éxito de este proceso se sustentó en la participación de las y los jóvenes, quienes con su energía y entusiasmo dieron vida a lo que solo era un proyecto del Centro Arte para la Paz. La fuerza y vitalidad de este Museo se sustentó en las y los jóvenes emprendedores y defensores de la memoria en Suchitoto. Todo este grande y hermoso proceso lleno de experiencias y aprendizajes lo dejamos plasmado en uno de los pocos libros producidos en Suchitoto.
Crespón de luto por Arnold Portillo
Recientemente nos enteramos de la lamentable muerte* de uno de los jóvenes que desde el inicio del proceso fue constante, inquieto y persistente en la creación y construcción del Museo la Memoria Vive en Suchitoto.
Un rápido ejercicio de memoria nos evoca al joven entusiasta, creativo, propositivo, cuestionador y apasionado por el aprendizaje. Como no recordarlo si fue tempestivo e inquieto, inquebrantable en sus ideas, afanoso, un voluntario de primera fila en las causas del Museo la Memoria Vive. Arnold -quien participo casi en todas las exposiciones- se ganó el reconocimiento del colectivo de jóvenes del Museo por su entrega, coraje, carácter y entusiasmo. Es precisamente desde este recuerdo, desde esta vivencia que compartimos en colectividad con él en la construcción del sueño del Museo, que rendimos hoy un pequeño homenaje a este joven que por años entrego muchísimo de su tiempo, esfuerzos, energía y creatividad por la causa de la memoria.
Lamentamos su partida y en nombre de todas y todos los que un día fuimos voluntarias/os en el Museo la Memoria Vive, deseamos expresar nuestras condolencias a su familia por la perdida irreparable de Arnoldo Portillo. Paz a sus restos.
Suchitoto, 25 de diciembre 2017
Compartimos este vídeo que recuerda su voz y trabajo en el Museo.